Pide y se te dará: cadena de sincronías 2013

Plaza Las Lilas, Providencia

Plaza Las Lilas, Providencia

Mmm, la cosa empezó el  martes 23 de enero. No, en realidad empezó antes, a fines de noviembre 2012, cuando Sol se propuso salir del pequeño departamento que la tenía asfixiada y hasta recluida (como se dio cuenta cuando se mudó). Ella sabía que su nuevo lugar tendría que ser en el mismo barrio: Providencia, cerca de  Plaza Las Lilas. Buscó con decisión cuando todo el mundo y hasta los medios te atormentan diciendo que hay -y efectivamente está- una burbuja inmobiliaria que tiene los precios por las nubes y que dada la llegada cada día más numerosa de inmigrantes de todos los rincones a Chile y a Santiago especialmente, sumado al supuesto mayor poder adquisitivo de varios chilenos, hay más demanda y menos oferta, lo cual no me lo creo del todo y es un gran excusa para elevar los precios con usura que raya -o traspasa- en la grosería. En fin, todo pasa, y esto llegará a su fin o explosión.

Pero la certeza interior de Sol no escuchó nada de esto. De pronto ella, que visitó unos 25 departamentos, supo de uno que estaban arreglando, pero que no ponía foto en internet, sólo la dirección y fue a mirar el edificio. Dijo con convicción: Aquí voy a vivir yo. Habló con la dueña y pese a que los arreglos demoraban esperó con fe. Cuando ya estaba casi listo pidió una descripción del espacio y le dijo a la dueña: ya, lo quiero, te mando mis papeles-. A lo que ella contestó: ¿pero si aún no lo has visto?- «No, pero yo sé y confío en que es para mí y que me va a gustar y es lo que necesito. Es mi departamento» -respondió con la misma férrea convicción de antes. ¿Resultado? Está instalada en el departamento desde principios de enero, que es muy bello, con vista a la cordillera y copas de los árboles, donde ella quería y encima ve a unos metros un campanario que fue muy importante en la historia de su familia y su madre. Sol está más que feliz con su nuevo espacioso-espacio, recordándonos, de paso, cuánto poder interior tenemos para encauzar y colorear nuestra vida.

Entonces, nos invita con Carolyn, otra amiga (y sanadora) a cenar el martes. Santiago amanece con corte de agua en varias comunas y la capital muestra su fragilidad, esa que no nos gusta asumir, como si fuera fácil habitar un espacio reducido rodeado de montañas que impiden el paso del aire, en un país siempre sacudido por alguna manifestación de la naturaleza; también -a mi juicio- revela el abuso de las empresas privadas que supuestamente se hacen cargo de un recurso natural con el que ganan muchísimo, pero no tienen ni medio plan de contingencia frente a emergencias; como muchas veces: el negocio es ganar plata pero no invertir ni prevenir ni cuidar al cliente y menos al bien común… La ciudad muestra también la oscuridad (barro) del negocio del agua, además de restringir y limpiar sus(nuestras) emociones (agua), de paso.

Por lo mismo, Sol nos pregunta si igual nos juntamos, y yo salto diciendo: sííí-. En su depa nuevo hay agua y en el mío también, así que no pasa nada.  Llegamos y además de disfrutar y brindar por el nuevo hogar que tiene muy buena energía (desde hace años, a mí hay lugares que me sacan, me expulsan y no puedo quedarme demasiado), de gozar con la conversación, las carcajadas y  el compartir, saboreamos un menú exquisito de…. comida árabe!!! Deliciosa, con rellenos de hojas de parra y zapallitos, hummus, falafel, carne kubbe… Había olvidado cuánto me gustan esos sabores, hace meses, en julio, almorzamos comida árabe muy buena, pero estábamos apurados y me faltó el disfrute de los gustos y especias. El tema es que ahora hasta quedé con ganas de seguir saboreando, pero mi panza no tenía más espacio aunque el encuentro duró hasta la madrugada… En medio de la cena me viene la certeza de que las tres tenemos que tener más de una encarnación por las tierras del actual Medio Oriente  y que ya nos debemos haber conocido de quizá cuándo, pues en esta vida nos encontramos (yo a ellas) practicando danza árabe hace años  y además yo he tenido un par de «regresiones espontáneas» y sincronías que me confirman que tengo más de una vida con hiyab o chador (tipos de velo) y todo, habibi.

Al día siguiente ando con antojo de falafel (croqueta de garbanzo) y todo lo demás. En el barrio sólo hay los clásicos shawarmas, pero no quiero eso. Busco en internet y hay un delivery cerca, pienso en llamar para el sábado o domingo. Pero el antojo crece y casi estoy por inventar un encuentro con los amigos para satisfacer las ganas. La semana avanza y cada cierto rato me acuerdo y me río sola con mi obsesión… Incluso el miércoles cuando fuimos al festival «Cine bajo las estrellas»,  antes de la peli hay stands de comida con sushi, carnes, sandwichs, pizzas, ceviche… y con un poco de ilusión busco algo árabe, pero no hay, obvio, si tampoco es tan popular, pese a que la colonia es numerosa en Chile…

Llega el viernes. Después de la jornada en mi consulta, a  las 4 de la tarde,  tengo hora de biomagnetismo en Ñuñoa. Antes de ir como unos trozos de piña y pienso que almorzaré después, en casa. Es mi segunda sesión y ya la terapeuta con los imanes liberaron un virus y un tema de microcirculación cerca del oído, que todo el rato tiene que ver con el vértigo que a veces me visita. La sesión está potente, medio me duermo en la camilla y luego me cuenta cómo va el tratamiento. A las 5 ya estoy de nuevo en la calle y con hambre; pienso tomar una calle que da al delivery árabe que encontré por internet. Ya casi saboreo el hummus y el falafel. Pero hace mucho calor y no sé si caminar hasta allá. Al final desisto porque igual quiero pasar a otra tienda que está al lado y desde ahí puedo tomar un colectivo que me deja en casa.

Bueno, para otro día será… Podría haber algún lugar por aquí -pienso- pero sé -era mi barrio de infancia y sigue siendo el de mis padres- que sólo hay pizzerías, hot-dogs y otras cosas… Me dispongo a cruzar la calle en el medio (por donde no se debe) y cuando miro en frente dice: EXQUISITOS SABORES DE PAKISTÁN, PARA SERVIR Y LLEVAR…. Guauuu! Casi salto hasta la otra vereda de pura felicidad y digo: es demasiado grande la Divinidad; Universo, eres muy bakán, gracias! Ángeles de la comida: gracias por favor concedido-. Entro curiosa y extasiada, es un lugar pequeño llamado «Karachi Spice», es lo que se conoce acá como «picada» (restaurant un tanto escondido, conocido por muchos de boca en boca pero sin publicidad; bueno, bonito y barato), son unas diez mesas con un poco de decoración pakistaní y una mesera chilena muy simpática que me muestra la carta donde están todos los sabores que tenía en mi paladar mental desde el martes y otros que desconozco pero que suenan tan bien… Me cuenta detalles del lugar, el único de comida pakistaní en Santiago… Vaya honor el mío!

Karachi Spice, en Pedro de Valdivia, casi esquina Dublé Almeyda.

Karachi Spice, en Pedro de Valdivia, casi esquina Dublé Almeyda.

Entonces, me siento a almorzar ahí disfrutando cada sabor con calma y placer: el hummus, las albóndigas especiadas, la ensalda aderezada con yogurt con cilantro, el arroz y… obvio, un té de menta. El falafel lo pido para llevar a casa a nuestro almuerzo del sábado. Luego converso más detalles del lugar y la carta con la mesera y hasta con el cocinero que lleva tres años en Chile y que es musulmán, por supuesto. Quedo re invitada para volver y seguro lo haré porque aunque el antojo fue saciado, en cualquier momento puede volver. En medio de la conversa tomo mi bolso y me río sola pues tiene caligrafía árabe, se lo compré a una chica que los hace a mano, de hecho el cocinero lo queda mirando….

Mi almuerzo en el Karachi Spice

Mi almuerzo en el Karachi Spice

Me voy satisfecha y feliz y recuerdo que originalmente a esa hora (la de mi almuerzo pakistaní-mágico-sincrónico) me juntaría con una amiga que al final me avisó temprano que no podía. La vida es perfecta, pienso, mientras voy a la tienda que tenía pendiente. Cuando estoy allá, terminando de pagar, suena mi celu y es Silvia, una gran amiga argentina-chilena con quién quedamos de vernos pues viene llegando de varios días en Baires, pero no coincidíamos con los horarios… Me dice: Jime, me suspendieron una hora de clases y pensé si nos juntábamos. «Eh, genial! veámonos en un rato en la terraza del hotel Bonaparte» -le digo y le parece perfecto igual que a mí. Al cortar y mientras me dirijo al encuentro, sigo pensando: qué mágica es la vida, cuántos regalos, sincronías y perfección hay en todo. Gracias a la vida, tarareo en el taxi, igual que el miércoles por la mañana después del muy buen encuentro en la casa nueva de Sol…

Al llegar al encuentro con Silvia, ambas pedimos un té… yo quiero otro de menta (las especias pakistaníes dan sed) y la chica me dice, tengo uno que es de Marruecos: ¡Ese mismooo! le digo con entusiasmo. Ya te explicaré porqué, amiga, le comento a Silvia…. Y la tarde-noche termima con un buen reencuentro y conversación, puestas al día desde el 21 de diciembre hasta acá, acompañadas de un cachorro gordito que pasean por la calle, varios ciclistas veraniegos, los pájaros cantores, la brisa que se cuela entre los añosos árboles y la luna casi llena que este fin de semana está en Leo: momento para celebrar, cerrar y agradecer… Sí. Todo es perfecto. GRACIAS…. A la Vida.

17 comentarios en “Pide y se te dará: cadena de sincronías 2013

  1. Como siempre Ji, como anillo al dedo…
    y es que salí de vacaciones el vierner y decidí quedarme en Stgo. una semana más, sólo para concentrarme y darme el tiempo de hacer mi lista mágica 2013 y pedir, y agradecer por todo y todos…
    Por lo mismo y nuevamente, mil gracias Ji
    Un abrazo, Poli

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  2. Ese resto me queda muy cerca de casa, voy a explorar. Además que quiero hacer un reportaje de los nuevos sabores árabes en Ñuñoa. un poco más abajo está por abrir Almalika y hay mil más. A mi me queda el Tarboush a una cuadra. Qué tentación. Y, bueno, es lo que heredé de mis bisabuelos, así que el sabor está en los genes también. abrazo y gracias por el dato.

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    • Qué buena herencia, Cris, y qué buenos datos porque el Amalika lo miré y quedaba lejos, pero esperaré este nuevo!!
      Un gran abrazo, habibi! 😀
      PD: Karachi Spice abre de lunes a sábado hasta las 11 pm y los domingos sólo almuerzo hasta las 4 pm

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  3. Hola Ji!!!!! Me siento muy identificada con la historia del depa de tu amiga Sol, me pasó algo similar y me cambio en un par de semanas a un lugar donde tengo la certeza que seré MUY FELIZ y tambien sé que si no sucedió antes era porque el momento es ahora… Todo sucede cuando tiene que suceder.
    Un abrazo enorme… hace tiempo no nos vemos pero te recuerdo con cariño y también mi mamá.
    Seguro será un buen año… Abrazos y sonrisas por montón.

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  4. ¡Hola Jimena!
    Me siento identificada con lo que contaste. Las sincronías son uno de mis motivos más importantes para no creer en las casualidades. Desde que puse la consulta y trabajo sola me ha ido quedando más claro. Cada vez que un paciente anula una cita (que en principio alguien podría pensar <>), para mí significa que no tiene que venir por que necesito ese tiempo para mí o para otra persona. Así que, cada vez que me pasa, pienso: ¡Gracias, gracias, gracias!

    Un amigo mío suele decir que no existen las casualidades, si no las caUsalidades. En el budismo zen (y me imagino que en el tibetano también) así lo indican. Visto lo visto, sobretodo cuando bajas el ritmo para observar, me queda bastante claro. Que no estamos aquí por casualidad, que no encontramos este blog por casualidad, que no nos pasan las cosas que nos pasan por casualidad. En mi casa siempre se ha dicho, pide y se te dará. Pero hay que saber pedir y confiar. Y si el ego nos arrastra eso no suele ser fácil, ya que el ego es impaciente y lo quiere todo ya, hasta las señales, ¡ya!

    Así que le doy gracias al universo (y a ti también) por el bendito momento en el que descubrí tu blog y sus interesantes lecturas. ¡Muchísimas Gracias! 😉

    Un saludo

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    • Sííí, el ego es un niño mimado que a veces se pone taaan pesadooo! Y sí, nada de casualidades… todo de sincronías y respuestas…
      A mí me pasa lo mismo con la gente que cancela, a veces es una lata porque podría haberme quedado más rato en casa o haciendo otra cosa, pero siempre siento que no tenían que venir y que está todo bien… Maravilloso!
      Seguimos caminando y danzando por este 2013! Abrazooos!

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  5. Comadre Lola ( es un decir muy antiguo), lo de Lola es por era asi el dicho no mas, pero Jime….Comadre Jime jajajajaj. hoy he encontrado este blog, lo que al igual que como ustedes dicen no es casualidad, y le agradezco a la vida haberme encontrado con este sitio que me he devorado leyendo y disfrutando

    Besos fraternales a todos en este blog, gracias por estos momentos tan intensos y saludables

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  6. a propósito de sincronías, me acaba de suceder algo. venía caminando a mi casa pensando en el yoga y la música que suele acompañar a esta disciplina. bajo la vista y veo un objeto rojo… un mp3… nadie alrededor… lo tomo y reviso… sorpresa! centenares de música hindú… llego a casa y en este momento ya he disfrutado de 5 de ellas…sincronías!

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  7. y también ha sucedido lo que deseaba y necesitaba desde el año 2003, año en que fuí atrapado por una cuadra que debe ser la mas tétrica y de mas malas vibras de la ciudad… allí históricamente han sucedido los hechos mas horrendos que pueden cometer los seres humanos. Atrapado en una especie de «Hostal», como la peli, pero desde un punto de vista emocional, anímico, espiritual… donde ocurrieron los hechos mas nefastos que han afectado mi vida… cambiándola definitivamente. Comencé a rogar para que esta situación cambiara sin que me perjudicara en lo laboral (pedí con mucho cuidado, ya que los deseos se cumplen pero es como en los chistes de genios…el pedido se cumple pero….. uffff… mejor no haber pedido nada…)… sentía y observaba en el transcurso de 3 meses como la creación trabajaba.. como cambiaba estructuras…como propiciaba las condiciones para que mi deseo se cumpliera… Y SE LOGRÓ a mi entera satisfacción…. salgo en 2 semanas de ese lugar maldito… repleto de maldad, locura, sicopatías, psicosis, es como si todo ser malsano de la ciudad se hubiese concentrado allí en una proporción nefasta… comprendo que debía pagar algo… y que se me debía provocar un cambio definitivo, lo que se logró a pesar del sufrimiento… endefinitiva lo agradezco… TENÍA QUE SUCEDER… DEBÍA SUCEDER… Ahora comienza una nueva etapa… lejos de aquel ambiente… cuando ya he nacido de nuevo..

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  8. Paso por acá, hoy 2014, me pasó algo sorprendente, ( pese a que soy medio brujilda igual me sorprendió) la mañana del partido Chile España, sin mucha fe porque creo que la FIFA es una mafia y está todo arreglado, para que ganen ciertos países, que en las primeras rondas siempre les toca equipos regulares y Chile la tenia de muerte, cocinando en mi casa,salta la caja de fósforos bajo mis narices yentonces me doy cuenta que tiene en la tapa una antorcha y la palabra Visctoria, y ocurre que la imagen Chile va a ganar,se me vino, pero no le di importancia, luego Chile gana, entonces recuerdo que al levantarme, pensando en algunos problemas, había preguntado si es verdad que el universo manda señales, debido a una situación personal, y creo que si, manda señales, Y he aprendido que la clave es vivir agradecido por lo que tenemos ,sentirnos ya abundantes y agradecidos por lo que Dios nos da cada día, salud amigos, un plato para comer, agua caliente un día de sol, una brisa pura, etc como dice Eckhart Tolle , y así se desatan las sincronías ,hermoso el blog y muchas bendiciones a ti y a todos los que pasen por aca

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