Guía para sobrevivir al 2020

Pero antes… a pedido del ilustre público, acá ESTÁ la info del Taller 1 de Astrología para principiantes y acá la del Taller 2 para conocedores de este arte cósmico. Comenzamos (si aún continuamos en este planeta 😀 ) a fin de marzo e inicios de abril.

No sé ustedes, pero yo, si bien estoy cansada como la mayoría de los chilenos porque de octubre 2019 hasta acá -al igual que algunos vecinos y otros países- hemos vivido como un año entero con toda la convulsión y el proceso de transformación que atravesamos, donde sale lo más bajo y lo más alto de nosotros y de este sistema, donde hay voces muuuy antiguas de todos los sectores y generaciones (hay gente joven muy vieja y viejos muy infantiles!) que, con sus miedos y egoísmos tan humanos, entran en juicios absurdos u obsoletos, además de niñerías, agresiones de todo tipo para dar y regalar, queriendo sacar partido de algo que es planetario (los humanos y nuestro ego podemos dar infinito ‘material’ con tal de «ganar», jaja)…  Igual, en medio de todo esto, mantengo una alegría interior por lo que estamos viviendo: siento honor de estar aquí y ahora, siento gran certeza de lo necesario de esta sacudida que no imaginábamos sería de esta forma (a ratos bastante primitiva y parada en la víctima, entre otras cosas), un zamarreo de nuestra oscuridad, también de nuestras comodidades -por incómodas que fueran-, que nos lleva a caminar de otra forma… Hace rato muchos hablábamos por distintas vías, del nuevo tiempo y de la caída del sistema…

Y acá estamos todos, en medio de la incertidumbre que tanto nos cuesta habitar y para la cual el sistema no está nada preparado pero sí sabe sacar dividendos del miedo; de todo realmente, esa es parte de la crueldad y desconexión en la que construimos hace décadas en el planeta entero prácticamente…

Imagen de Denise Husted en Pixabay

Hoy, cual más cual menos, cada uno atraviesa su propia cuerda floja, su propia incertidumbre… En mi caso, ni siquiera sé si realmente podremos dar las clases que señalo al inicio, por ejemplo, por más que muchos las disfrutemos y me las pidan;  tampoco sé si se realizarán invitaciones, proyectos o viajes que en otro momento serían un claro ‘sí, obvio; hagámoslo’…  Así estamos, practicando más que nunca eso de vivir el presente. Qué valioso regalo, en medio de grandes dolores y miedos.

Siento que capas y capas de oscuridad, de cosas no asumidas ni vistas, salen a borbotones y no todos tendremos el temple necesario para atravesar esta metamorfosis que nos corresponde, donde emergen –y esto seguirá, de la mano de Júpiter en Capricorniotantas verdades.  Esto sale de nosotros, de nuestros pequeños mundos, de nuestras ciudades, países, continentes, planeta. La noble Tierra, Gaia, está -con nosotros- en gran depuración. Y al mismo tiempo, en dolores de parto y no nos queda otra que ayudarla a pujar. Y como todos los embarazos y partos, tienen su t-i-e-m-p-o. No se puede acelerar ni atrasar a nuestro antojo… Es un tiempo preciso y perfecto el de este renacer planetario… Por eso, ya que a nosotros se nos ocurrió estar aquí para vivirlo y quizá para contarlo en unos años más, acá dejo una Guía de Sobrevivencia para disfrutar más este desafiante 2020:

1. Bajemos expectativas, las buenas y las malas. Si poh. Atravesamos un tiempo muy verdadero, donde no hay ni medio espacio para fantasear y menos para andar expandiendo la nube negra. Permitir que las cosas SEAN en vez de esperar con ansiedad el mejor o peor escenario será un valioso gesto ahora. ¿Pa’ qué sufrir por adelantado o aplaudir antes de que todo se muestre? En la puerta del horno se quema el pan, así que mejor esperamos a que se hornee bien y si quedó salado o desabrido, siempre habrá forma de mejorarlo o compensarlo con nuestro ingenio. Encima, ya lo dijimos en distintos espacios donde comentamos las Predicciones 2020 (acá la entrevista en EmolTV por si les interesa) este año es entero alecionador. Así no más.

2. Dosifiquemos los círculos dramáticos y/o demandantes. Como nuestro ego es insaciable, puede no bastarle con las revueltas de por aquí y por allá, con los –supuestos– virus que cruzan fronteras, con las economías y sociedades revueltas, con la inestabilidad de todo lo externo; con el fuego, el agua, las temperaturas, los volcanes, la agricultura y los vientos agitados. Claro, al lindo (me refiero a nuestro ego = nuestras formas de ser en pensamientos y sentimientos) se le puede ocurrir además generar –o frecuentar– un grupo de amigos, familiares o compañeros quejosos, negativos, que se paren desde el miedo y el rechazo (por no decir odio) todo el rato, que ven el peor escenario… ¿Es necesario? Pa’ eso mejor prender la TV y mirar noticias… Estamos –se supone– grandes (amén) y parte de nuestra adultez y de activar mayor consciencia es soltar o dosificar –sin rechazo sino desde el autocuidado– espacios que nos cansan. Claro, hay algunos que no podemos evitar, pero sí podemos elegir no contribuir a mayor negatividad ni odios, poner otros puntos de vista, compartir herramientas, diversificar las conversaciones y poner más risas antes que drama.

3. Cultivemos lazos, en especial de amistad. Lo siento, pero yo sospecho de la gente que no tiene amigos o tiene muy pocos. He visto cómo en personas con pocos lazos el ego se densifica, el narcisismo se eleva; el ombligo se agranda y la rigidez se impregna. (Y sobre esta observación, aplico una de mis frases favoritas que digo en los talleres: ‘Si te ofende, es que es verdad’). Entre los mejores salvavidas y nutrientes para este ciclo (que durará hasta mediados de 2021) estarán nuestros amigos. No importa dónde vivamos, la edad, el trabajo, nuestros intereses: es tiempo de cultivar y ampliar nuestros círculos. En complementación al punto anterior, es clave compartir con gente que nos aporte, nos haga reír, nos dé otra mirada, a ratos nos diga algunas verdades, nos contenga, nos acompañe, nos haga ponernos en otros zapatos, nos inste a nosotros a acompañar más allá de la familia de cada uno. El dar y recibir de la amistad es uno de los factores que nos permitirá salir airosos de este ciclo.

4. Respiremos profundo y Aceptemos cada día un poco más. No estamos en un lugar ideal lleno de colores y buena onda; probablemente no estamos dónde ni cómo nos gustaría. Estamos donde tenemos que estar y eso, en mucho casos, puede ser más bien gris o seco en lo externo. Es preciso, entonces, detenernos a inspirar más profundo, mirar con más calma y comenzar poco a poco a decirle sí a la realidad de cada uno. El rechazo solo traerá más miedo y violencia (por si acaso, por si alguien no se enteró, de esto nuestra humanidad ya tiene milenios) en nuestros ambientes y además aumentará aquello que nos molesta porque le damos poder, también porque lo llevamos dentro. Recordemos una de las leyes espirituales y base de la astrología: «Como es adentro, es afuera»; lo que tenemos dentro aparece materializado en forma de personas, relaciones, situaciones, realidades…  En cambio, a eso que nos jode, sencillamente hay que darle espacio, pues es un reflejo de nuestras dinámicas interiores. Puede ser alguien o algo que, si nos detenemos a mirar con más aceptación (amor), en ese preciso momento comenzaremos un cambio que, poco a poco, diluirá su peso en nosotros.

5. Activemos humildad. Que tiene todo que ver con lo anterior. Ya está: Agachemos el moño, inclinemos la cabeza frente a lo actual. El paradigma de luchar es antiguo y trae más -de nuevo- agresión. La Vida y su infinita sabiduría es mucho más grande que nosotros y toda nuestra inteligencia o argumentos fanáticos o respaldados en quizá qué. Si ella –la Vida– no nos permite algo, es así y punto: no es el momento. Si ella abre las puertas, aprovechemos. Muchas veces un «obstáculo» está ahí sólo para que practiquemos la humildad de pedir ayuda; también creatividad, flexibilidad, espera, paciencia, protección (porque no es sano que eso se dé), madurez, intentarlo de otra forma, etc. Abramos el corazón para mirar nuestro presente.

6. Frente a la ansiedad, movámonos. ¿Alguna vez hemos estado al lado de alguien constantemente ansioso?, ¿Alguna vez hemos sido nosotros quienes estamos en ansiedad?… ¿Nos dimos cuenta de lo agotador que es para nosotros y para el resto?… Quedarnos quietos comiendo compulsivamente  frente a la TV, darnos vueltas en la cama en medio del insomnio; desbordarnos en beber, fumar, hablar, chatear, leer, comer, comprar, mirar el celular, buscar información, mordernos las uñas… Sólo traerá más de lo mismo: adicciones, miedos y desgaste que nos dejan en energía básica.  Es preciso caminar, bailar, nadar, salir a dar una vuelta, hacer estiramientos, subir escaleras, salir al parque. Activar lo físico hará que se aliviane nuestra mente y cuerpo para estar más presentes en vez de ansiosos. De paso, le hacemos un favor a los cercanos.

7. Recordemos: Somos naturaleza y necesitamos de ella. Por más llenos de pantallas, teclas, botones, wifi, comida sintética, químicos y demás que estemos, somos realidad física, energética y natural. Dentro nuestro están los cuatro elementos: fuego, tierra, aire y agua. Por eso, la Pachamamita, como la llaman cariñosamente los andinos, es una madre generosa y sabia que es capaz de recibir nuestras fragilidades, cansancios, rabietas, tristezas, autoagresiones; transformarlas y devolvernos la energía perdida de forma luminosa. Si somos afortunados y tenemos cerca montaña, mar, lagos, bosques, ríos, árboles, plantas, rocas, aire puro… Conectemos cada vez más con éstos; dejemos en ellos lo que nos sobra o nos llegue a saturar y en conversación con la naturaleza que habitamos y somos, pidamos energía. Caminar descalzos en la tierra, tomar más luz del Sol (sin exagerar, obvio), sumergirnos en agua salada (aunque sea en la tina) y agradecerle todo lo que nos ha sostenido hasta ahora, puede marcar la diferencia en nuestro día a día.

8. Practiquemos austeridad: Lo dijimos en conversaciones radiales, aquí en Cooperativa y acá en Adn. También en las Predicciones mismas de Emol y en este honorable podcast Las nuevas Claves del éxito. Sí, este 2020 es austero (2021 también, pero no se lo digamos a nadie para no causar conmoción en los egos más consumistas y temerosos).  De lo bueno poco y Menos es más; podrían ser los lemas del año. Con esta cumbre de planetas intensos en signos de tierra (Plutón, ‘Don Satur’ o Saturno para la gente docta y Júpiter en Capricornio + Urano en Tauro) atravesamos todo un replanteamiento –y reformas– del sistema, de cómo vivimos el dinero, el trabajo, el éxito, la ambición, la explotación de la naturaleza, el disfrute de lo material. Así que afirmemos la envidia de lo que otros tienen, la opulencia, las tarjetas de crédito y sus engaños, las compras por imitación, miedo, moda o gula; nuestras trampas o abusos, los proyectos demasiado exigentes o de mucha inversión de tiempo, energía y dinero… Vamos de a poco. El gordito Júpiter es muy bromista y a veces inventa –o agranda– historias;  así que  es tiempo de manejar con más consciencia nuestros recursos, incluido el tiempo. Por eso el punto 2 de este listado es importante. Valorar lo simple y conformarnos con lo que ya tenemos sin caer en mediocridad sino desde el criterio de realidad (gran factor de evolución este año) es fundamental.

9. O nos reímos o… nos reímos: Dejemos de tomarnos tan en serio (a nuestro ego y a lo que nos pasa). Dejemos de ofendernos por cualquier cosa, de creernos importantes (jajajajajaja), de creer que a nosotros no más nos duele o nos afecta algo, de querer quedar de inteligentes, cool o diferentes; de intentar ganarle a otros, de apurarnos, de sufrir porque sí o porque no, de buscarle explicación a todo, de opinar de todo… Sshhhh. Silencio. Mirémonos, y mejor riámonos de nuestras pequeñeces humanas; somos demasiado chistosos y repetitivos, ¿sí o no?

10. Escuchémonos: A nosotros mismos. A la sabiduría que portamos y que no atendemos por ir demasiado rápido, enchufados en decenas de cosas, menos a nuestra alma. Si nos detenemos más podremos oír lo que de verdad necesitamos ahora, lo que nos nutre y nos da alegría verdadera, lo que es importante. Y después de eso viene otro desafío: hacernos caso. Quizá sea una siesta, o descansar de un espacio, de un vínculo, o de un hábito; quizá darnos un gusto, quizá aquietarnos o no hacer algo determinado, quizá un sí rotundo, un inicio, un final o una pausa. Escuchémonos y actuemos en consistencia con esto, aunque sea un pequeño gesto que nos encamine a esa voz interna. 

11. Seamos realistas, prácticos, y tomemos medidas ídem. Ya varios lo hemos vivido en diferentes latitudes: las comodidades o bondades del sistema pueden no funcionar debido a colapsos de distinta índole. Entonces, acá copio y pego un punto que puse en un Test previo al 2018 donde mirábamos el ciclo de tres años que este 2020 concluimos. Es esta pregunta: «¿Usted tiene dinero en efectivo en casa, velas o linterna, fósforos, mantas, comida, agua, frutos secos, papel higiénico, medicamentos, celular cargado, los números de teléfono importantes anotados… en caso de emergencias?». Tal cual. Es tiempo de tener muy bien resuelto lo material y logístico para estar más preparados –y tranquilos, ojalá– frente a las sorpresas de este tiempo agitado.

12. Nuestro propio gesto. Dejo este punto abierto porque todos tenemos herramientas y miradas de este presente. Porque si de algo se ha encargado Plutón en Capricornio desde 2008 hasta acá, es de devolvernos nuestro poder para construir nuestras vidas en vez de entregárselo todo a alguien o a algo (como al sistema, a lo material, a nuestra carrera o al trabajo, factores regidos por Capri). Este último punto es para que cada uno agregue algo si es que así nos nace. Cada uno tiene sus propias valiosas recetas y su sabiduría para atravesar la incertidumbre, como este afiche que le compré a una artesana en mi última visita al sur de Chile y que puse frente a mi escritorio para verlo cada día. Este es mi propio punto 12… Un gran abrazo y a vivir todo lo que este desafiante 2020 nos regale y aquello que nosotros generemos acompañados de sus oportunidades, de nuestros guías y de la voz inigualable e incondicional de nuestra alma. Hasta pronto!

PREDICCIONES año 2015: Un puente a otra Vida

«¡Atención! A los sobrevivientes de 2014 se les informa que pueden respirar profundo, sacudirse los remezones vividos, tomar su equipaje (que se supone está más liviano) y avanzar tranquilamente por el pasillo central con destino al 2015, año de transición que nos llevará a otras orillas que podremos descubrir a lo largo de estos meses».

Así comienza la presentación de las PREDICCIONES 2015  que ya están publicadas en Emol.com y que cada año escribo en este sitio de noticias chileno…

Según yo podría irme al sur de Chile en noviembre pasado a escribirlas pero esta vez el destino y la Vida quisieron que me quedara en Santiago (no podemos discutirle a la energía, las señales y circunstancias; menos ahora) a revisar el panorama del año y de cada signo, inspirarme, interpretar, traducir y comunicar algunas pistas sobre este 2015, que miro como una bella transición después de dos años y medio que conformaron un gran portal de portal 2014crecimiento para nosotros… Y como buen portal tuvimos que dejar atrás muchas cosas, junto con impregnarnos de la nueva vibración al cruzarlo… Es emocionante ver cuánto hemos crecido y cómo cada día más y más deciden despertar a esta nueva manera de vivir, más simple, más conectada, llena de señales, menos dependiente de lo externo, con nuevas herramientas personales y energéticas, sin duda con más consciencia y libertad poco a poco, donde hay un ejercicio central: hacernos cargo -con alegría- de lo que nos pasa, sentimos, hacemos, provocamos… Hacernos cargo de nuestra vibración y sus efectos… Soltar culpas y cambiarlas por responsabilidad… No es simple, pero es liberador y transformador.

Y otro de los ejes de este tiempo, como lo decía en la nota anterior es reconocer el Amor en todo lo que vivimos, nos guste o no… Qué tiempos luminosos, abiertos y desafiantes atravesamos! Hay mucha belleza si nos detenemos a mirar…

ventura scenicBueno, y sin más preámbulos, ACÁ están las Predicciones del Año 2015: Un puente a otra vida. En la portada va la presentación del año, con sus energías y propuestas, y luego a la derecha están los botones para leer los vaticinios de cada signo, donde van tres párrafos explicativos y luego: Conexión interior, Trabajo en el mundo, Amor Verdadero y… Mensaje del Universo (mi parte favorita, jaja).

Y como la vida es generosa y abundante, hoy me entrevistaron los chicos de EmolTV, un gran equipo de jóvenes periodistas y compartimos más sobre 2015, Chile, cosas chistosas y un poco para cada signo… A veces la vida nos da más cuando esperamos menos 😉 La pueden ver acá.

Un gran abrazo, a disfrutar, abrir el 2015 con ganas y sin expectativas! Hasta pronto y GRACIAS otra vez!

Todo sirve

Yo iba a escribir la segunda parte y clave de la nota «Nos estamos muriendo…», pero el destino quiso otra cosa. Y a ese señor –don Destino- yo lo he tenido que oír y aceptar tantas veces en esta vida que, además de ser uno de los protagonistas de este blog, le doy su espacio, ya que es fiel y sabio compañero, a veces un poco mandón y caprichoso, pero amigo al fin.

Palacio LaMoneda

Palacio de gobierno, La Moneda, Santiago de Chile

Entonces, ahora me toca escribir -a riesgo de que algunos se enganchen desde el ego y salten a discutir- de política. Aunque no. En realidad escribo de símbolos, de lo que nos refleja nuestra realidad, entre esas la vida política. Y en Chile se asoma la elección presidencial para el ciclo 2014-2017, en la cual se presentan nada menos que… nueve candidaaatooos. Todavía no me lo creo, ¿en qué momento fuimos capaces de crear nueve personas postulando a dirigir un país que bordea apenas los 16 millones de habitantes? Luego dicen que el realismo mágico no existe. A mí esto me parece historia de cuentista latino surrealista, e igual una gran señal de los tiempos acuarianos-circulares que estrenamos donde todos tenemos espacio y el poder lo llevamos dentro, no está afuera, por tanto ya no hay líderes ni maestros, ni guías. Nadie a quién seguir, ni admirar, ni idolatrar. Enhorabuena. Pero esta información y realidad aún no se instala en todos, menos en quienes están en el poder, que se ven erráticos, perdidos, fuera de lugar, lejos… Y está bien, estos primeros síntomas son parte del cambio. Los referentes y formas antiguos ya no sirven… Tendremos que generar sistemas nuevos poco a poco. Y en eso estamos varios aunque la economía y otras estructuras no quieran enterarse. De hecho el otro día exclamé frente a la tele: ¡Al fin, qué bien! -cuando el conductor leyó la noticia de que el consumo estaba bajando en Chile, gesto absolutamente sano para algunos, amenazante y dañino para otros que sólo piensan en acumular y en cifras. Si no necesitamos llenarnos de cosas… Muchos podríamos vivir con bastante menos, y no como pseudo hippies ni desde la neurosis tacaña, sino desde la consciencia que valora lo simple y austero porque sabe que en el tener no está la felicidad y también para no desgastarnos más; dándonos gustos y todo, pero sin ostentación ni gula… Digo yop. En fin, muchos estamos en esa postura: gozar la vida consumiendo menos, usando el sistema a nuestro favor y no siendo devorados por éste, que se cae a pedazos y tiene una energía tan fría.

Y en radio Cooperativa conversamos para hacer las cartas astrales de ¡¿los 9?! candidatos. Los reviso y son tantos que siempre se te olvida alguno, ¿verdad?, hasta me marea un poco la información de cada uno. Entonces los miro y escucho los últimos días y, desde mi experiencia de años de trabajar con gente en consulta donde el ego, el alma y la consciencia se presentan con tanta belleza y notoriedad; en charlas y talleres, me siento frente a varios «niños» candidatos. Diría que hay tres que tienen una vibración más de grandes… Ah, pero antes de seguir hago una aclaración: es la primera vez en que no me dan ganas de votar, en que los miro a todos y no me pasa nada, ni sí ni no. No me llama ninguno. No es rechazo, lo aclaro. No lo digo desde el discurso barato de: todos son iguales, todos roban, no sirven pa’ na’; porque nunca ha sido esa mi mirada ni creencia y considero que ese texto le sirve a algunos para que nada cambie. A varios de estos nueve les creo sus intenciones y convicciones. A todos les rescato cosas. A algunos les veo ciertos dolores, miedos y heridas. Con un par me río y bastante. Otros me llaman la atención. A un puñado ni bien mirarlos les saco el rollo interno y siento su vibración energética -es parte de mi pega (trabajo) espontánea en esta vida- y al mirar la carta astral digo: ahí está el motivo de que sea de esta u otra forma… Esta vez me pasa que sólo observo. Supongo que votaré el domingo (por estos días casi no hago planes, que es de lo que iba a escribir originalmente, ja), pero aún no sé por quién y esto es nuevo para mí, así que lo vivo desde la sorpresa y la auto-observación. Es lo que algunos llamarían un «espacio de neutralidad»…

egomultipleBueno, volviendo al punto hay tres a quienes se les nota que han trabajado algo más su ego, que se sienten (perciben) más adultos. Para mí, desde mi absoluta subjetividad y también desde mi experiencia: Bachelet, Sfeir  e Israel tienen una energía más profunda, más conectada, de un ego algo más domesticado. No son ni mejores ni peores. Estoy hablando de símbolos y energía. El resto -para mí, insisto- son adultos que siguen -como tantos- en lo que llamo «modo niño», es decir, pegados en el ego que generaron en la infancia (todos lo hacemos) sin moverse a otra vibración más evolucionada: están en el rol de ser el distinto y llamador de atención, el serio e inteligente, el rabioso, el buena persona, el justiciero, el víctima, el agresivo y defendido (a la primera te pega o se ofusca), el ponderado, el sabiondo, el bacán (ganador), etc. Y me parece muy revelador de nosotros como sociedad, como seres humanos. Así somos (o hemos sido): infantiles. Pero no podemos seguir siéndolo. Por eso, «nos estamos muriendo», porque tenemos que soltar nuestros mecanismos (que están en lo que llamamos la lavadora, si usted ha seguido este blog) y dar el paso hacia nuestra luz, el espacio puro y transparente que habita en cada uno sin distinción; hacia lo mejor de nosotros , hacia nuevas formas de expresar, resolver, caminar, trabajar, desarrollarnos, cuidarnos y amar(nos); hacia nuestros talentos para ponerlos al servicio de todos los seres… 

personalidad espejoAsí, sigo mirando a los nueve candidatos a Presidente y veo al ego colectivo -y personal- representado en ellos. Veo cómo nos reflejan (ojo con cuál de los 9 nos irrita más porque seguro algo nos espeja de nosotros mismos). Y cómo, sin imaginarlo, nos invitan a cambiar y crecer. A dejar las armaduras oxidadas para poder conectar con lo luminoso y dejar de competir y/o demostrar -qué lata. Les agradezco, pues todo sirve, toda nuestra realidad es un símbolo y agente de crecimiento interno. Con su comportamiento, discursos y posturas antiguas, nos invitan -por contraste- a compartir, aceptar y contribuir cada día desde nuestros pequeños mundos, que son tan importantes como un sillón presidencial, pues nos toca dirigir -con amor y consciencia- nuestra Vida -honorable e infinita tarea-, sacarle partido, disfrutarla, volverla armónica, gratuita y de calidad; crecer, rebajar los intereses, tener mejor salud emocional, física y mental, trabajar en nosotros y para los demás con dignidad, mejorar nuestro medio ambiente con pensamientos, palabras y acciones más sanas; abrirnos oportunidades, creer en nuestra fuerza, pedir ayuda cuando sea necesario -siempre hay más de un momento-, respetarnos, ponernos creativos y dejar de auto-prometernos cosas que luego no hacemos… Estos tiempos nos quieren comprometidos con nuestra evolución desde la alegría e interconexión con el Todo, sin sacrificios ni fanatismos…

Por eso, aunque sin candidat@ estoy entretenida, agradecida de lo que nos muestran y expectante mirando cada escena de esta peli donde el ego y la consciencia se presentan a cada instante. Acá dejo la nota de radio Cooperativa en video y en audio. Y… aunque dudé de publicarla o no, me reí tanto cuando la recibí, que también dejo la genial imagen -amo la creatividad chilena- que me mandó mi querido Juan Pablo para quienes nos informamos de política y de…. Avenida Brasil!!, la telenovela que nos tiene pegados a muchos. Para la fanaticada que entiende de historias verídicas y noveleras, acá va. Hasta la próxima!

Av brasil chile

Invierno 2012: Grandes oportunidades

El Sol llega cálido en una tarde del clásico «veranito de San Juan», en Santiago,  y por lo mismo me quedo un buen rato en el balcón, mientras sostengo una divertida conversación telefónica donde nos reímos a carcajadas de nuestras fortunas y desgracias con un gran amigo uruguayo… Para variar -en este 2012- en pocos días han pasado montón de cosas… Ambos estamos algo cansados y con ciertas incertidumbres en este inicio de invierno, pero también alegres y más claros que en otros tiempos…

Intuyo que la intensidad de este invierno -y obvio que del verano para la gente del Norte- será potente, aleccionadora y que nos obligará a fuertes cambios. Por lo mismo, lo más importante es estar centrados, despiertos, alegres, confiados… Y mirando más allá de las apariencias, de lo «oficial»… Y la tarea, aunque no fácil, resulta estimulante, pues cada día abre tantas áreas, que el trabajo personal está muy vivo: nos damos cuenta de más cosas, sanamos otras, podemos ver y sentir cómo los hilos mágicos de la vida se entrecruzan para armar nuestros caminos de crecimiento y, entonces, nos llegan regalos, oportunidades, encuentros, invitaciones, proyectos… Pero también podemos enfermar, vivir decepciones o agresiones, hacer limpieza (algunas dolorosas), entrar en duelos… Y  en medio de la vorágine este invierno 2012 además abre nuestra capacidad de generar; con la energía de Venus y Saturno nuestra voluntad se vuelve más firme para hacer -materializar- nuestros planes y comenzar a vivir más de acuerdo a nuestra intención, a nuestra energía, a nuestros anhelos del alma.

Este invierno esconde este secreto: ¡Podemos cambiarlo todo! Es cosa de proponérselo y comenzar. Después de la caída de nuestras hojas (pesos) en Otoño, estamos «pelados», como me dijo la periodista Cecilia Rovaretti, en la entrevista en radio Cooperativa sobre el Invierno. Por tanto, aunque adoloridos, estamos más livianos…. Ahora, no es un cambio de maquillaje el que estamos llamados a ejercer, eso es insustancial y de corto efecto, encima nunca es suficiente cuando cambiamos por fuera y hacia afuera: cabello, atuendo, peso, casa, decoración, auto, trabajo, pareja, amigos, hobbies, etc…. Lo que podemos cambiar profundamente es a nosotros mismos -por dentro, obvio- y la vida que llevamos… Eso, sin duda se reflejará afuera, pero el comienzo es interior…

Este tiempo frío y lluvioso que viviremos generará grandes semillas de cambio en nosotros y, como dice Drexler «el que quiera creer, que crea… y el que no, su razón tendrá»… Por tanto, para quienes lo crean, es tiempo de levantarse, no a hacer y salir, sino a sentir: Qué quiero cambiar en mi vida, de qué me quiero despedir, con qué me quiero reencontrar; qué anhelo generar, qué me comprometo a abrir y qué a cerrar… Podemos respirar más profundo y tomar la calma, el calor de hogar del invierno para cocinar nuestro cambio paso a paso, poniendo cada ingrediente a su tiempo en el fuego lento y permitirnos sentir los aromas de cada uno, los cambios de color, textura y consistencia que comienza a tomar nuestra vida…

Del gran Alberto Montt

El invierno es un tiempo muy propicio para observar los apegos de nuestra mente: el pesimismo, la fantasía, la crítica, el miedo, la paranoia, la hiperactividad, la envidia, los celos, la comparación, el victimismo, la rabia, la agresividad, el resentimiento, el rechazo, la soberbia, la prisa, la racionalización de todo, la obsesión, la adecuación…. Toda esa maraña mental -nuestra Torre de Babel ambulante– en la que estamos constantemente puede ser observada con más agudeza en este tiempo frío, dándonos mayores posibilidades de iluminarla, calmarla e ir limpiándola aunque sea un poco. Si comenzamos a identificar nuestras voces y hábitos mentales, la vida que llevamos realmente puede transformarse. Es así.

Esto, observar nuestra mente, es una poderosa y básica práctica espiritual. Y vaya que la necesitaremos este 2012 si queremos salir airosos de las pruebas, aventuras y regalos que nos esperan.  Desde antes, ahora y en adelante, considero que sin alguna mínima práctica diaria espiritual, emocional o física, o sin una mirada de la vida más profunda (o todas las anteriores), no será fácil sobrevivir a los intensos hechos que ya vivimos y que no pararán. Por eso, bienvenidos la meditación, contemplación, caminatas, yoga, nadar, bailar, trotar, terapia psicológica, Flores de Bach, Reiki, biomagnetismo, canalizaciones… A su vez, el agradecimiento, la creatividad, el auto-conocimiento, la trascendencia, el humor, la mirada amplia capaz de ver señales y símbolos, la conciencia de lo unidos que estamos y que todos somos uno, son parte del equipaje indispensable de este 2012 que atravesamos y de los viajes que vengan en esta década…

…Y, bueno, llega la noche, se va el sol tibio y el invierno aparece otra vez, hay que cerrar las cortinas, prender la estufa para conservar el calor y, aunque a Mafalda no le guste, calentar la sopa con cilantro y orégano frescos….

Mandala del Ritual de Invierno

Para los pasajeros del blog que gusten, en esta entrevista de radio hay más sobre el sentido del invierno y un mensaje para cada signo astrológico; y en este video está parte del bello ritual de invierno 2012 que grabó EmolTV, donde celebramos la llegada de este tiempo interior, sagrado y mágico…. Hasta pronto y, de nuevo, ¡Feliz Invierno 2012!