Símbolos, gestos y señales 2015

Antes de regresar a Venezuela -vaya valentía!-, Gladys, amiga nueva y colega astróloga, nos recomienda una peli, «Atlas de la nubes», no tanto por la calidad de ésta en lo cinematográfico sino por la temática y cuánto logra dimensionar el alcance y dinámica de nuestras vidas pasadas y futuras… Igual es Hollywood, pero está buena y me recuerda las lecturas de carta astral donde cada vidas pasadasdía nos sumergimos un poco en esas experiencias de otras vidas que nos regalan distintas cosas: energías, actitudes, talentos, desafíos, gestos y conocimientos que nos ayudan a integrar las piezas de esta encarnación… Y llega a ser divertido de pronto mirar a gente y sentir qué energía o rol tenían en otras vidas… A veces nada más al entrar a mi consulta o en la calle en una conversación cualquiera de café o al pasar, si te detienes un poco se siente ese pasado que enriquece esta vida… También me río bastante con el tema, como cuando nos encontramos con perros de raza pitbull terrier que me parecen tan feos y poco armónicos que los veo y les digo mentalmente (y algunas veces en voz alta lejos de sus dueños): no te preocupes, en la próxima vida vas a ser muy bonito, pero en esta no te tocó no másp; qué le vamos a hacer! -Y me quedo mirando su ‘feitud’ de cuatro patas entre risa y curiosidad…

Todo está lleno de símbolos y señales. Del pasado, también del presente y a veces del futuro. Si nos detenemos y estamos más conscientes podremos verlas, si nos quedamos en la literalidad solamente es más difícil y la vida se vuelve más plana y dormida, aunque a ratos más fácil -para algunos- también, pues pasas por alto gestos importantes de la vida y puedes echar más la culpa afuera en vez de ver que nuestra realidad nos habla a cada instante, tiene que ver con cada uno de nosotros en su contexto y está a nuestro favor…

En el Ritual que vivimos en Curicó, además de la bella mariposa que entró a celebrar con nosotros y a confirmarnos nuestra transformación interior, hubo otro símbolo. Justo cuando nos disponíamos a hacer un ejercicio para transformar los miedos, la pantalla del compu donde pongo la música me dice que queda nada de batería, cosa que no debió haber pasado porque dura bastante y llevábamos poco más de una hora compartiendo. Entonces busco el cable y no está. Mientras, les cuento a todos lo que está pasando: los miedos se están haciendo notar y me (nos) mueven porque ‘amenazan’ con detener el ritual. No encuentro el cable cerca y recuerdo que está en un armario que forma parte de la pared del fondo de la sala. Tengo que interrumpir y con gran simbolismo abrir las puertas de miedo oscuridadcorredera que dan a un espacio oscuro y buscarlo entre los bolsos. Cuando los tengo compartimos lo que acaba de pasar y al final una chica me dice que fue como el miedo clásico que tenemos de niños por la noche: abrir una puerta en la oscuridad… La energía, siempre se muestra y a veces de  forma muy evidente…

Otras veces con un poco de ironía. Como cuando vamos entrando a ver una peli chilena testimonial, «El bosque de Karadima», sobre el abuso de un sacerdote católico, Fernando Karadima, a un grupo de jóvenes en los años ’80 y ’90; al subir la escala una pareja de adolescentes nos pregunta: ¿Aquí dan «Los Vengadores»? -y yo salto, me río y les digo: no, pero casi, como que sí. Esta es otra versión de esa, jajaja -y nos reímos con ganas mientras los chicos no entienden demasiado. Claro, la peli chilena y el término de este arraigado abuso en una clásica iglesia de Santiago logró salir a la luz por la denuncia de hace pocos años de algunos de los -actuales- hombres que vivieron en silencio esta experiencia oscura en complicidad de varios religiosos y de sus altos mandos… Y como en estos tiempos las verdades de todos afloran con ganas, ahí está también una muestra…

Hay algunas señales que a veces quedan en la incógnita. Durante la lectura de carta astral de Cote, en un momento la oficina se llena de olor a cigarro -puaj!- pero no de alguien que esté fumando, sino de ese típico olor a cenicero rancio… Ambas nos damos cuenta y me levanto a cerrar la ventana que está entreabierta y vuelvo a rociar con el aromatizador que siempre pongo en la consulta y en los rituales, pero también le digo que es muy raro porque nunca me pasó y encima estamos entre dos consultas médicas y nadie fuma (uno de los gestos más pasados de moda y de muy baja vibración, igual que otras adicciones; aprovecho de decirlo!)… Una semana después, Cote durante un taller de biomagnetismo es diagnosticada por el profesor como parte de los ejercicios, y cuando le está hablando de una actitud a cambiar la sala se llena del mismo olor que sentimos en mi consulta y ella se acuerda y se lo comenta al profe; luego a mí. Los tres quedamos en ascuas y le digo que escuche la grabación de la carta astral para ver en qué tema entró ese aroma-energía…

Las señales, símbolos y gestos están por todas partes y es bueno aprender a leerlos, a seguirles la pista y ver/sentir qué nos dicen, hacia dónde nos están guiando. Qué nos recuerdan o advierten. Muchas veces son mensajes de nuestros guías y maestros que asisten nuestro camino. Otras veces son llamados -y gritos en algunos casos- del alma y del espíritu… Pero no importa tanto el origen sino su sentido… ¿Hacia dónde apuntan?, ¿qué me muestran en este momento?… Un amigo que está peleado con su hermano gemelo hace unos meses me cuenta que en abril caminaba por unas tiendas y se queda en una vitrina mirando a la gente que está dentro sin ningún afán. Ve por detrás a un tipo y le recuerda mucho a su hermano. Piensa qué parecido es. En eso el tipo se da vuelta y efectivamente es su hermano. Mi amigo lo llama y lo saluda. El hermano se vuelve sin saludar y sigue en sus compras… Queda triste mi querido amigo, pero al mismo tiempo comentamos la magia de la energía y cómo la Vida le muestra lo conectados que están y cuánto amor hay entre ambos como para sentirlo antes de saber que es él y que encima el destino los junta en un lugar lleno de gente… Más allá del ego de cada uno, hay ahí una señal de amor y unión… También la Vida le da el regalo de verlo después de mucho, aunque sea unos segundos y comprobar en qué vibración está, sin juicio, sólo ver…

Por estas semanas hay también un gran símbolo. El terremoto de Nepal. Por un lado está la tragedia con todo su dolor, muerte, destrucción, desolación y más; dolor que desde acá no llegamos si quiera a dimensionar con los miles de muertos y de sobrevivientes atravesando probablemente el capítulo más extremo y heroico de esta y otras vidas… Y tras toda la energía de muerte que atraviesa a un país que en sí mismo es un gran símbolo dada su milenaria historia, riqueza cultural, arquitectónica, histórica, geográfica y espiritual -uno de sus mayores tesoros-, hay tremendo gesto simbólico… Para mí -es una mirada-, esta es la mega señal del nuevo tiempo: definitivamente dejamos al Era de Piscis y entramos con todo a la de Acuario. Nepal «cae». Se retira –con sorpresa y devastación evidente. Energéticamente «se ofrece» para mostrarnos que todo lo devocional pese a lo profundo, arraigado, bello, mágico y hasta romántico que pueda ser, ya fue. Aunque suene frío, pero hablo desde lo simbólico: no lo necesitamos ya. Es tiempo de caminar desde el corazón con nosotros mismos. Sin maestros externos sino conectando con el maestro que cada uno de nosotros es. Sin sacrificios, culpas ni separándonos del mundo como ha sido por más de 2 mil años en la era pisciana. Ahora tenemos que hacernos cargo y caminar con dignidad y consciencia en el mundo, en la realidad diaria de cada uno; es ahí -en cada pequeño y gran gesto diario de nuestras vidas- donde tenemos que aplicar nuestra espiritualidad y consistencia interior.

Terremoto en Nepal (foto: Agencias, AP)

Terremoto en Nepal (foto: Agencias, AP)

Esta zona, que incluye a Tibet, que tanto sentido nos dio y que tanto contribuyó al despertar de la humanidad donde tuvieron un rol protagónico en generar una nueva consciencia y conocimientos de invaluable aporte -con los cuales millones nos formamos y otros tantos siguen haciéndolo con el legado del Buda, que con toda su simpleza y contundencia revolucionó la consciencia y la observación de la mente-, se despide con un terremoto que destruye sus bases… Toda la cultura que representan comienza su despedida. No porque se terminen; de hecho si miro la carta astral del terremoto se ve que cosas muy auspiciosas saldrán de todo este dolor. Me refiero que pasan la posta a otras zonas y seres para este nuevo despertar de consciencia… De algún modo, la humanidad ya no podrá mirar hacia allá en busca de respuestas y de prácticas espirituales. Es mucho lo que está destruido: los hermosos lugares sagrados están entre escombros y dada la precariedad pasará un rato antes de que ellos se pongan de pie y de volver a aventurarse a esas zonas, al tiempo que al reconstruirlos pierden parte de su milenario valor y algo de su vibración original… Nos despedimos de Nepal con infinito amor y agradecimiento por toda su entrega, humildad, sabiduría y trabajo al mostrarnos cuánto podemos crecer interiormente si nos dedicamos a observarnos con disciplina y armonía... Honramos este momento, toda su historia y legado….

Igual que como algunos lo han dicho, para mí  la posta espiritual-energética de esta era acuariana está acá, en América del Sur. No porque seamos bacanes (geniales)ja, ja. Sino porque nos corresponde el honor de crecer y ser una fuente de despertar -por tanto de consciencia y sanación- para todos y por largo rato. En muchos gestos esto ya se nota hace años. La magnífica cordillera de Los Andes es y será la protectora de este proceso; como si el Everest y el Himalaya completo le cerraran un ojo y en reverencia le dijeran: bien, ya cumplimos; recibe esta bella y magnífica ‘posta’. Ahora muestra todo tu poder, elévanos y enraízanos al mismo tiempo, te corresponde entregar todo lo que tienes y sabes en este momento crucial de la humanidad… Y acá recibimos esta mega y bellísima misión…

Como le he dicho más de una vez por aquí y en varias conversaciones, «crecer duele», no a nosotros, sino a nuestros egos, claro, lo cual no le quita peso pero nunca está demás recordarlo… Dentro de nosotros está todo intacto y listo para brillar cada vez más con cada aprendizaje, pero nuestras caretas, comodidades y fijaciones salen trasquiladas. Para eso tenemos en esta América el privilegio de contar con decenas de terapias -desde las más ancestrales hasta las más innovadoras- que nos ayuden a abrazar a nuestro ego para que nos acompañe en la tarea y podamos soltar hábitos (auto)destructivos… En tiempos de crecimiento uno de los gestos más sagrados, que hace la diferencia y cambia nuestra vibración es: PEDIR AYUDA. Ojalá lo recordemos constantemente en este ciclo tan bello y desafiante…

Los Andes con su majestuosidad y sus volcanes, nos recuerdan lo jóvenes que somos a este lado de la Tierra donde todo está tan vivo y bullente, listo para ser entregado a este nuevo ciclo que nos pide más creatividad, autencididad, poder interior, verdad, intuición, madurez, risa, amor por nosotros mismos, por todos y el Todo que somos…

Mientras, Chile -nuestro sur americano y nosotros- seguimos purificando tanto valles como volcanes, política, economía y, sin duda, el poder y cómo lo manejamos… Muchas señales de limpieza tenemos por aquí, pero la más importante es la interior. Este mayo nos propone bastante introspección y nos anima a despejar desde espacios hasta relaciones. Mediados de 2015 nos quiere más livianos y claros frente a nuestras vidas…

Y cuando termino de escribir esta nota me cuentan otra señal: después del terremoto en Nepal el Everest se elevó. Como si nos recordara desde la altura que las experiencias de quiebre y de dolor nos hacen crecer y elevan nuestro poder aunque nos cueste ser capaces de verlas y sentirlas de esta forma… Desde este sur poderoso y remecido, seguiremos creciendo, aportando y reconociendo cada pista del camino. Gracias Nepal ❤

prayer-flag

Llamadas del destino: Meditación-Ritual en Curicó, sáb 18 abril

Desde el año pasado que se me aparece Talca y Curicó, centro sur de Chile, por distintas señales y mensajes reiterados: gente me escribe, me invitan, me piden información, hice un par de lecturas de carta astral a distancia, una amiga se fue por trabajo y me dice de ir a descansar y también a dar charlas o talleres… En enero, cuando otra amiga me contó que capaz que trasladaban a su marido para allá, mientras ella me lo explicaba con cierta angustia -natural frente a un cambio drástico, ¿no?-, yo abrí los ojos y la escuché atenta, e igual por dentro se me dibujaba una sonrisa diciendo: otra vez esta zona!

Ya en agosto 2014, en un seminario sobre la herida bioenergética de Chile, con Natalie Sève y  Juan Pablo Uribe, que fue muy mágico en varios sentidos y un llamado -casi un mandato- del destino porque nada más ver el aviso en Internet dije: voy! -sin saber ni quién lo daba, ni dónde era, ni cuánto costaba-  y donde incluso usaron la carta astral de Chile (tema que me apasiona); conocí a un par de nuevas amigas nuevas muy divertidas; al propio Juan Pablo, quien da formación en biosíntesis y geometría sagrada; a Natalie, aguda investigadora; y a Doris, sanadora made in Suiza pero casi chilena, quien llegó a estos rincones por puro destino sin saber que se quedaría y que hoy vive en una parcela en Curicó, muy conectada con la montaña y con la vibración de este sur de mundo que tanto poder tiene, desde donde terapea y acompaña a varios en el camino y hace sus propios rituales de ciclo. En el almuerzo nos contamos un poco de la vida de cada una y quedamos de contactarnos, aunque ella no mira mucho internet. Cada tanto me acordaba de ella y algún mail nos mandamos con cariño. Pero en marzo ya me invitó a ir y a mí que me gusta moverme, conocer gente y lugares nuevos, además de hacer lo mío hasta ahora: cartas astrales, rituales y charlas sobre este tiempo agitado, le dije: dale, sí! voy!- Encima el destino (la Vida) ya me lo había mostrado tanto que no me daba para contradecirlo.

eclipse20marzoY ahora ya se armó este sábado 18 de abril en Curicó un Ritual de Luna Nueva en Aries… No tanto por la Luna sino porque cerramos este intenso período que comenzó con el eclipse solar que tuvimos pegado al equinoccio, en marzo. Este mes nos ha mostrado de frente tanto lo que teníamos pendiente y teníamos que mirar y hacer, como también oscuridades que no queríamos asumir, y la gran gama de poder que tenemos especialmente en momentos desafiantes. Este mes -nos guste o no- nos reconectó con la Vida. La vibración -aunque no lo parezca- está más alta y luminosa, por lo mismo afloran las sombras y pese a lo que muchos digan, siento que hay menos miedo, lo compruebo cada día en las lecturas astrológicas, en las conversaciones con los cercanos y en el aire… Como lo escribí alguna vez acá, estamos en pleno ‘Apocalypso’ y al estar tan sacudidos, estamos también más poderosos, osados, más despiertos y llenos de Vida más allá de lo que esté pasando hoy en nuestros pequeños mundos… Es bellísimo ver cómo muchos se están atreviendo a construir una vida distinta…

El viernes por la noche nos reíamos y sorprendíamos de cómo una amiga que lleva rato trabajando en un banco pero que tuvo una licencia larga por cáncer y entonces por fin comenzó a valorar su tiempo, creatividad y espacio personal; otra vez la magia de la Vida, ¿verdad?… Y ahora que volvió al trabajo, no sólo a su cuerpo le cuesta estar en la antigua -y esclavizante- dinámica laboral, sino que ella nos confesaba que por primera vez en años ha mirado la puerta de la oficina y se ha preguntado: ¿y qué pasaría si yo ahora me voy; me paro, tomo mis cosas y me voy, simplemente, no vuelvo más? -guau! le respondemos con risas y también la felicitamos, es un mega despertar… Me suena hasta escena de una película. Levantarte e ir por tu nuevo destino, por tu nueva Vida; hacer caso a ese llamado interior que es capaz de dejar lo seguro atrás, que quiere otra experiencia, que necesita otra vibración…. En eso están muchos, soltando lo cómodo y conocido y atreviéndose como sea, de a poco o con el salto al vacío, el tema es comenzar.

nuevavida1Es esta Vida Nueva, esta posibilidad que se abre para todos en este momento de la humanidad, la que celebraremos en Curicó, con un ritual que dé la bienvenida a nuevas formas de movernos en estos meses intensos y estimulantes, y también cierre con agradecimiento este agitado inicio de año que nos sigue mareando un poco dentro de la centrífuga en la que llevamos tiempo y de la cual a ratos asomamos ya partes del cuerpo porque estamos próximos a terminar un gran proceso de limpieza en nuestras vidas…. Muy bello, por cierto, pese a los desafíos y dolores que cada uno sigue sorteando… Desde aquí, entonces, y aún en Santiago que por fin da espacio al otoño, los invito a esta meditación, que es posible gracias al trabajo y generosidad del Centro Médico Vichuquén, Doris Gygi y equipo! Gracias, son todos bienvenidos y a celebrar nuestra Nueva Vida que nos llama y que brilla cada día más!

DÓNDE: Centro Médico Vichuquén, Calle YUNGAY # 34, CURICÓ
CUÁNDO: Sábado 18 de abril, de 19 a 21:30 hrs.
CUÁNTO: $7 mil + frutos secos para compartir
CÓMO: Consultas e inscripciones en el 8 299 59 62 / 9 084 2067 y en saludconalma@cmvichuquen.cl Y si se decide a última hora, llegue no más. Si puede traiga su cojín. ¡Los esperamos!
image001

Tiempos de purificación, dolor… y Poder

Por estos días recuerdo algunas enseñanzas budistas de hace años. No sé si estábamos con algún lama que visitaba Chile o si fueron ejercicios de contemplación del legado del Buda. Pero me quedaron muy marcadas porque me parecieron tan esencialmente humanas y cotidianas que las incorporé al día a día y luego las compartí en un par de talleres de meditación… Capaz que estoy mezclando cosas del budismo, pero lo diré al estilo Ji, es decir el mío: El amigo Buda definió hace cantidad de años -por el 600 a.C.- los tipos de sufrimiento, ¿por qué sufrimos los humanos? Mmm, primero porque nos falta algo, por lo que no tenemos, lo que sea: auto, casa, pareja, hijos, un trabajo que te guste, dinero, ropa, tiempo, etc. Luego, la Vida generosa y sabia te da eso que te desapegomanosfaltaba y al fin lo tienes. Genial! Lo disfrutamos. Pero al rato comenzamos a sufrir de nuevo porque aquello que llegó por fin no es como yo esperaba, obvio (segundo tipo del sufirir); no es como a mí (ego) le gustaría: el auto, la casa, la pareja, el trabajo, etc., no es tan agradable, tan bonito, tan cómodo como yo pensaba que sería, «me hace gastar mucho», «ahora no tengo tiempo», «tengo un jefe terrible», «mi pareja es muyceloso/a», «no doy más con esta casa»…  Son frases/pensamientos por el estilo que comenzamos a emitir y, por tanto, la rueda de sufrimiento a accionar. Hay, además, un tercer tipo de sufrimiento: cuando aquello que tengo -me guste mucho o no tanto- lo pierdo, y experimento el desapego -ejercicio sagrado y constante de cada encarnación– y sufro por aquello que perdí: el auto se echa a perder, me tengo que mudar, los hijos crecen y no están tan cerca, la relación de pareja cambia o se termina, me echan del trabajo o cambian las condiciones, la ropa tan linda que me compré se estropea, etc., etc., Y así somos, estamos constantemente en estos tres estados en vez de aceptar más, de darle espacio al ego para que patalee pero también recordarle que como dice un proverbio budista: Esto también va a pasar…. Y la Vida es un constante cambio.

Y por si fuera poco, hay un cuarto tipo de sufrimiento: Cuando viene uno tras otro. Cuando te pasa de todo en un tiempo no muy largo, cuando pensabas que ya terminaba y aparece algo más, no te alcanzas a sentar y otro hecho llega a tu vida. Lo que muchos llaman una mala racha. A eso los budistas lo llaman el sufrimiento sobre el sufrimiento. Y encima frente a éste te felicitan porque estás purificando mucho karma. -Linda la cuestión! -hemos dicho en estas situaciones, ¿no? Recuerdo a amigos uruguayos y ahora a un par de chilenos que están en esta experiencia y entonces uno ya no quiere más y se pregunta ¿hasta cuándo? Una amiga ariana decía estos días en su cumple: ya, y dejen de mandarme cosas por un rato -señalando a sus guías que le han explicado el porqué y para qué de algunos hechos y enfermedades que le correspondió vivir los últimos meses…

Y desde el verano hasta el comienzo de este otoño en Chile, me parece que estamos en este tipo de sufrimiento. En la acción irrefrenable de una descontrolada centrífuga, de una gran agitación purificadora que parece no querer dejarnos tranquilos y llamar nuestra atención desde donde estemos para comenzar un nuevo tiempo con otra energía y hacer los cambios internos que tenemos que hacer ya, no mañana.

cordillera de los andes

Cordillera de Los Andes, Chile

Chile, con toda su belleza y precariedad, se deja ver estos días en que sucede uno y otro hecho desde fines de 2014 hasta acá: revelación de oscuros temas políticos y económicos que tocan a las élites de todos lados hasta con cárcel preventiva para algunos -cosa nunca vista en estos rincones-, un volcán que erupciona y saluda cada par de días, incendios en bosques milenarios y en zonas costeras, lluvias inéditas en zonas desérticas que provocan tremendos aluviones que arrasan con ciudades y pueblos completos y dejan otros llenas de lodo y desechos tóxicos de la rica minería de la zona frente a la perplejidad y desolación de sus habitantes, accidentes aéreos y terrestres de gente que intenta ayudar en estos últimos hechos… Uuufff! Cuánta limpieza y crudos remezones para nuestro ego… Cuánto dolor, decepción, asombro, verdad y fuerza interna se mezclan en cada hecho de los últimos meses… No sólo para Chile, en muchos espacios geográficos y personales estamos en plena agitación purificadora…

El norte de Chile, ante un drástico cierre de ciclo, dolor y poder juntos. (Foto: Publimetro)

El norte de Chile, ante un drástico cierre de ciclo, el dolor y el poder interior  juntos. (Foto: Publimetro)

Y este movimiento intenso que también pasa en el cielo entre el irreverente Urano (despertar de consciencia, innovación, sorpresas, liberación, locura, vientos, electricidad, aeronáutica), el poderoso Plutón (transformación, muerte, intensidad, profundizar, secretos, energía subterránea, volcanes, intuición, obsesiones, dinero compartido), el mágico Neptuno (empatía, inspiración, caos, entrega, aguas, evasión, fantasía, unión) y el sólido Saturno (límites, obstáculos, disciplina, logros, ambición, rigidez, tierra, montañas, madurez, sabiduría). Juntos hacen de las suyas y nos remecen para decirnos que ya no podemos quedarnos esperando algo más, tenemos que levantarnos a resolver en nuestras vidas y hacer los cambios necesarios por dolorosos o amenazantes que sean porque si esperamos a que vengan de afuera la energía será aún más drástica… Luego de estos tres años de gran crecimiento, ahora nosotros tenemos que tomar la posta de nuestra transformación y dar pasos cada día. Ya no somos los mismos. Y los hechos externos lo anuncian, lo reafirman… Estamos en una purificación de todo lo antiguo en nosotros; de nuestros propios abusos, rigideces y evasiones. Nos corresponde a todos el despojo de las comodidades y obsesiones que nos estancan para tomar la nueva Vida que se nos ofrece donde la autonomía, la creatividad, la intuición, la coherencia, la felicidad cotidiana, la consciencia, la mirada despierta, el corazón abierto y el desarrollo de nuestros talentos son los ingredientes claves…

alma diamanteEn estos momentos aparentemente hay puro caos, pareciera que reina la inestabilidad y la destrucción de las formas y de lo que era sólido en nuestras vidas. Pero es mucho más que eso. Estamos en pleno despertar de nuestro PODER INTERIOR y esto es tremendo regalo. Mucho de lo que está pasando dentro y fuera es para activar la chispa de poder que reside en nuestro corazón verdadero, no el de Hollywood ni el de telenovela turca, por cierto; sino el diamante de luz que está al centro de nuestro pecho y que contiene toda la información de lo que fuimos, somos y seremos. Desde este espacio podemos aquietarnos, pedir respuestas -o pistas- a la Vida, conectar con nuestros guías y maestros y entonces movernos con poder espiritual, es decir, no sólo por la voluntad egoica que quiere todo ya y a su forma… Toda esta agitación puede sacar lo mejor de nosotros. Es como entrar al ojo del huracán, aquietarnos, respirar profundo, ir al corazón y desde esa vibración saber qué hacer y hacerlo, eso es Poder…

Ahora que abrimos este abril eclipsado, donde tenemos más herramientas y contexto para mirarnos y ver tanto lo luminoso como lo oscuro en nosotros (incluidos nuestros abusos y agresiones, ojo, que aún se nos están mostrando y a cada rato), es un tiempo precioso para seguir transformándonos y permitirnos un renacer brillante. Todo está a nuestro favor. Incluso la destrucción e incertidumbre que bajo su aterradora amenaza nos llaman a reinventarnos desde la fragilidad, el agradecimiento y las pequeñas osadías que esconden tremenda fuerza…

otoñoComo lo dije en radio Cooperativa la semana anterior, desde aquí honro la experiencia dolorosa y drástica del Norte de Chile sumergido en el barro y en la incertidumbre. Agacho mi cabeza ante la grandeza de hombres, mujeres, niños y viejos que hoy no tienen nada y viven -además de dolor- crudas incomodidades y extremo desapego. Honro su caminar, todo lo que nos enseñan y todo el poderoso proceso de transformación que nos muestran… Como ellos, estamos llamados a -de un momento a otro- comenzar de nuevo más allá de los miedos, de las creencias, de los egoísmos que nos muestran quienes tienen todo para ayudar y aún no lo hacen (a veces las tragedias revelan lo peor y lo mejor de lo nuestro), de las rabias y penas que nos inundan… Que la experiencia de quienes viven hoy este cierre e inicio tan drásticos dé bellos frutos, que entreguemos y reciban toda nuestra ayuda material y energética, y que el Poder de su (nuestro) corazón nos anime a todos a construir una Vida Nueva, más flexible y despierta. Infinitas GRACIAS y que renazcan en gloria y majestad. Así es y así será ❤

En excelentísima compañía

DSCN9984

Sendero al mirador Bandurrias, San Martín de Los Andes

Por fin me quedo conmigo. Respiro profundo con mucho placer en medio del bosque, de vuelta del mirador Bandurrias, en San Martín. Subimos con mis compañeras de cuarto, Nadia y Nati, dos argentinas que tomaron sus vacaciones por el sur y que están algo cansadas de recorrer porque han hecho muchas cosas en poco tiempo; en su último día de viaje deciden hacer algo más tranqui y vamos lento por el empinado sendero que está en medio de tierras mapuches, que toma unos 45 minutos cruzar… Un lugareño de unos 70 y varios, con ojos profundos y cabello cano, nos indica por dónde ir y nos dice que acostumbra hacer este camino –lo admiramos y envidiamos, obvio-, aunque “está pesada la calor hoy día”, así que se sienta un rato bajo una sombra… Al llegar arriba hay viento y la vista es amplia e imponente, muy bella, se siente la fuerza de esta zona de lagos y montañas y todo es azules y verdes poderosos… Agradezco y disfruto. Nos sentamos cada una en silencio sobre las rocas a mirar la panorámica, sentir el momento y tomar fotos. Al rato nos despedimos, las chicas siguen a La Islita, a unos 30 minutos caminando más abajo, donde pasarán la tarde; yo vuelvo al pueblo, necesito mucho estar conmigo y en cuanto entro al bosque siento ese regreso con regocijo… Qué bien se siente acompañarse.

Desde el mirador Bandurrias, San Martín de Los Andes

Desde el mirador Bandurrias, San Martín de Los Andes

Adoro compartir con distinta gente, e igualmente muchas veces necesito ese contacto interior que es único, silencioso y tan enriquecedor como el estar con otros. Necesito también salir de la rutina y en ocasiones esa pausa para mí tiene que ser conmigo, necesito darme el gusto de acompañarme; más de una vez he rechazado invitaciones muy atractivas porque toda mi energía y las señales me dicen que ese fin de semana o ese espacio de pausa es en una vibración más quieta y no hacia fuera, como suele gustarle a una parte de mi ego. A él a veces le cuesta entenderlo, pero una vez que comenzamos el viaje se pone feliz y me acompaña con su mejor sonrisa. A ratos también me jode, me hace trampas, me pone distractores y obstáculos -como a todos, ¿no?- pero se aquieta mucho al respirar y reconocer que estamos en otro espacio disfrutando. Al ego hay que educarlo y avisarle cuando vas a hacer cambios o comenzar algo, si no, se resiste y comienza a dramatizar como tanto le gusta. Por eso me da risa la pregunta de Inés ese mismo día por la tarde; me escribe por unos talleres que ella organiza y le digo que estoy en el sur hace unos días; me pregunta que con quién viajo. Conmigo –le respondo. –Ah, te pregunto por curiosidad porque yo nunca he viajado sola, creo que me daría miedo o pena –agrega. Me sonrío y le digo por mensaje: Nooo, es bacanooo, mira mi blog, ahí están las aventuras. Creo que te gustaría –le digo y recuerdo muchas lecturas de cartas astrales donde esto, aprender a estar con nosotros mismos y darse espacios de retiro es prácticamente un mandato de nuestro mapa astral; y muchas personas no lo descubren ni lo aceptan fácilmente, mientras que otras me cuentan que lo saben y que se dan esos espacios porque si no colapsan… Y hay algo más: nunca estamos solos, siempre estamos con nuestro corazón diamante que todo lo sabe y lo contiene, junto a la presencia incondicional de nuestros guías y maestros que más de una carcajada sueltan con nuestras andanzas…

… Al mediodía, en este regreso ‘intro’ por el bosque siento mucho más los aromas y aprecio otros detalles que antes pasé por alto porque íbamos entretenidas en conversar y reírnos, en este caso de nuestro mal estado físico que sufre con las subidas, risas que también fueron un agrado…

De vuelta el sendero se torna más mágico y puedo contactar más con mi presente, con mi corazón, con los guías, con los elementales del lugar y con un par de pequeños pajaritos que me acompañan por un rato sin salir volando ante mis pasos… Me detengo en una parte sólo a respirar, aquietarme, sentir y agradecer, mis oídos parecen agudizar su poder y percibo cada sonido del bosque, en medio de esto el crujir de las ramas de añosos árboles me hace reír porque parecieran saludar y suenan como antiguas puertas de madera… El aire está húmedo y la temperatura agradable, me viene emoción con lagrimita casi por todo lo vivido, parece poco y es demasiado al mismo tiempo…

DSCN9994Por la tarde sigue el paseo y el trabajo por un par de cafés del pueblo y finalmente decido ir al día siguiente a un lugar que apareció como señal dos veces en el mismo día aunque no era mi prioridad: Villa Traful, un pequeño poblado en medio de un bosque que rodea un gran lago de aguas más turquesas y un entorno más puro, sin pavimento y apenas un par de lugares donde comer. La excursión va por camino de ripio por el paso Córdoba, con la típica vegetación patagónica pero más rojiza, distinta a lo que se ve por estos lados, muy bella, y nos detenemos en distintos lagos, ríos y miradores donde la energía es muy abierta y magnética al mismo tiempo.

Una vez en la Villa, hay mucho verde y un poco de viento, se siente aún más la conexión con la naturaleza y la lejanía de la ciudad. Almuerzo algo rápido en una terraza sobre el pasto, no quiero encerrarme en un restaurant, entonces conversamos un poco con Rubén, que oficia de chocolatero, heladero, mozo y cajero. Me pregunta que de dónde soy y surge el tema del volcán. Le cuento que tengo que cruzar pronto y que espero que el paso esté abierto porque parece que esa mañana de la erupción lo habían cerrado.

Lago Traful

Lago Traful

Luego parto al lago y antes paseo un poco entre los árboles. Me encuentro con un matrimonio mapuche que toma mate en un mirador. Él también me pregunta de dónde soy y me dice que “es muy buena la gente de Chile”, que conoce Valdivia, que estuvo hace unos años, que todo muy lindo, que no le gustó tanto el pescado, lo encontró muy salado porque es de mar, pero que sí le encantaron los mariscos y se trajo una caja de almejas y machas para la familia. Me dedico a escucharlo y sentirlo y a mirar los ojos de su esposa que apenas conserva sus dientes delanteros y tiene una mirada muy chispeante. Él es muy sociable y me cuenta varias cosas y me dice que “estamos acostumbrados a los lagos; yo hace como diez año que no me meto acá, imagínese; es que como lo vemos todos los días”, y nos da risa porque mientras yo me maravillo para ellos es lo más normal… Así somos, es como los chilenos con la cordillera, que damos por hecho que la montaña está ahí y ni la disfrutamos, mientras que cualquier extranjero no hace más que admirarla… En eso me despido y les digo que voy al lago. -Sí, vaya, ¡vaya a mojarse las patas! –me dice con un ademán tocando su sombrero; yo lanzo una carcajada y le respondo: bueno, como tú digas, me iré a mojar las patas, te haré caso! –y su esposa se ríe moviendo la cabeza. Una vez en el lago los diviso de lejos, los saludo y seguimos sonriendo… Me siento con los pies en el agua –como ordenó mi amigo- sintiendo toda la vibración pura de ese lugar y al agua a temperatura precisa. Cuando me doy vuelta veo que atrás mío hay unas cuantas bandurrias quietas que se camuflan un poco entre las piedras, las saludo y un par me mira, el resto sigue inmóvil. La vista, el sol y el agua son una delicia. Cierro los ojos un rato y reconecto con el octavo centro, el corazón verdadero; siento gran plenitud, siento calma, alegría, amor, apertura, confianza… Puedo palpar esa perfección de la vida que muchas veces creemos que tiene luces de colores o es espectacular, pero que suele ser simple, quieta, sin afán ninguno. Sólo estar presente disfrutándolo todo, sin presiones ni pretensiones. El sonido del agua en las piedras me atrapa y me quedo mirando todo. Al rato una chica gordita de rulos rojos se acerca con su tablet a fotografiar a las bandurrias, más allá figuran su madre y su abuela, son calcadas y nos saludamos riéndonos un poco de la elegancia de estas aves que parecen vigilar la escena y no inmutarse.

DSCN0104Al salir del lago me entretengo mirando a dos perros, un golden retriver y un mestizo que corren una y otra vez. El primero agarra una piedra del agua en el hocico y corre hasta los pastos (unas dos cuadras más allá) a dejarlos, mientras el otro lo sigue cual escolta. Hacen eso una y otra vez y me río con su juego que parece tan absurdo pero debe ser el mejor pasatiempo de la tarde. Con una señora también nos divertimos viendo el juego perruno que tiene para rato. –Qué aparatos estos dos, mirá cómo corren –me dice sentada a mi lado en una banca.

Me quedaría horas –o días- aquí, pero en un rato tendremos que regresar con la combi que nos pasea por acá. Ya lo dijo Charly, el chofer, de quien soy su copilota, quien en el viaje nos conversa con el típico tono sureño algo más arrastrado sobre política, medioambiente e influencias varias de la Argentina, además de contarnos más cosas de esta zona. Una vez en camino y cuando ya tengo ganas de siesta, nos detenemos en lago Falkner, con el mejor panorama para una tarde de paseo: sentarnos en la orilla a tomar mate con facturas sintiendo el sol en la espalda. Estoy extasiada y a diferencia de una argentina divertidísima que está cerca de mí y que habla fuerte, no me molestan ni las abejas ni las avispas que dan vuelta cada tanto. Estamos sólo la inmensidad del lago, las montañas, la arena tibia, el sabor del mate, las facturas con membrillo, el cielo azul, las mariposas, las abejas, la gente alrededor y yo.

De vuelta en el pueblo, en San Martín, nos despedimos entre los viajeros, Charly me dice que me quede tranquila, que ya el volcán está quieto. Paso al terminal de buses a ver cómo van los viajes a Chile y José, el encargado, que a esta altura ya me conoce y nos saludamos con agrado, me dice que está todo normal, que por la mañana detuvieron a los primeros buses pero que para el día en que me voy seguro estará abierto. Me muestra en Internet las noticias del día y me dice que tiene sobrinos en Pucón que lo llamaron y le contaron que “el espectáculo fue hermoso, tío”. Entonces me voy al lago Lácar, a unos metros, a sentir el atardecer, agradecer y seguir este día con tantos y conmigo. Un verdadero placer.

DSCN0150

Dar saltos

Camino entre Pucón, Curarrehue y el paso Mamuil Malal. Sur de Chile y Argentina

Camino entre Pucón, Curarrehue y el paso Mamuil Malal. Sur de Chile y Argentina

En Curarrehue, sur de Chile, suben más pasajeros al bus y entre ellos uno que parece gaucho, de unos 70 y algo, con su sombrero negro. Se queda de pie y a los minutos se sienta al lado mío. Nada más hacerlo se pone a contarme que él viaja siempre, que conoce a los choferes, que es chileno (tiene un acento bien mezclado), pero se fue muy joven a trabajar a Argentina, a San Martín de Los Andes, y que se mueve entre un lado y otro. Me pregunta que cuál es mi gracia y me da ternura porque es un dicho antiguo para muchos pero seguro se usa por acá. -Jimena, y ¿tú, cuál es la tuya? -Héctor -responde y nos damos la mano. Me cuenta además que hace poco más de un mes enviudó, que quería mucho a su mujer, a quien le dio una infección a los riñones y murió muy rápido, que tiene dos hijas grandes y vive con ellas y que vino a su campo porque trabajando se despeja un poco, pero que tiene que ir a San Martín al médico porque «hace una semana que me vinieron ahogos en la noche y me cuesta respirar». -Es tu pena, ¿sabes? -le digo en un suspiro que hace en una pausa. Me mira y me dice: si poh, mi hija me dijo lo mismo porque a la menor le vinieron también hace tres semanas-. Ante lo cual digo: es que es muy reciente y tu cuerpo te muestra la tristeza que siente… De ahí seguimos conversando hasta que se sube Carmen, que tiene el asiento que él ocupa y alguna broma le hace cuando lo ve pararse y él le dice que la conoce. Para cuando llegan a dar con el vínculo de ambos, ella ya está sentada a mi lado y vamos riendo los tres, haciendo bromas, mientras Héctor ya acomodó los bolsos de ella y queda de pie mientras conversamos de todo un poco y hacen bastantes chistes en doble sentido pero con cierta inocencia de pueblo chico que no llega a ser vulgar ni incómoda… El viaje avanza acompañado de risas, conversaciones, complicidad y un paisaje bello entre la montaña de Chile y Argentina. Luego compartiremos el mate, sandwiches y galletas mientras pasamos ambas aduanas rumbo a San Martín de Los Andes, mi destino de este viaje de vacaciones y trabajo donde pensé que haría menos calor, pero el cielo insiste en estar muy despejado y el sol muy fuerte, aunque ahora ya empezó a bajar un poco la temperatura.

Volcán Lanín desde la aduana argentina

Volcán Lanín desde la aduana argentina

Primero llegué a un caluroso Pucón, sur de Chile, ya despidiéndose de una exitosa temporada de verano repleta de gente. Por suerte, porque las aglomeraciones no me van. Ahí estuve todo el día con Ale, que desde el invierno vive al lado el lago, donde es asistente en un hotel y también supervisa una tienda en el centro. De un momento a otro su vida santiaguina y en crisis cambió, cuando todo parecía ir peor y casi no tenía casa, una amiga le ofreció irse a Pucón a trabajar por unos meses. Eso fue en invierno, cuando una manaña de feriado nos encontramos en la terraza de un café y me cuenta  de su pena reciente y miramos su carta astral que, acompañada de Urano (innovación, cambios repentinos y liberadores), mostraba que sí o sí, además de estar atravesando una de las tantas «noches oscuras del alma» que a todos nos toca vivir más de un puñado de veces en esta encarnación, ahora era tiempo de hacer una vida nueva. Se sincronizaba, entonces, el ofrecimiento del sur y ella supo ver la señal, dar el salto con todos los miedos y tristeza a cuestas y soltar lo conocido para comenzar de nuevo. Al poco tiempo todo empezó a fluir, llegaron más oportunidades, los dolores se transformaron y aunque está muy cansada, también está con más energía, divertida como siempre y con nuevos proyectos que la entusiasman… Es por vivencias como estas que podemos confirmar que siempre está todo bien, que todo lo que nos toca vivir es preciso, tiene un sentido y es una oportunidad. Sólo hay que tener la visión y el corazón abiertos para tomar lo que la vida nos regala siempre: penas, aventuras, alegrías, desafíos… Todo forma parte de la experiencia de crecimiento y de los propósitos de cada uno…

DSCN9801Después de pasar todo el día con Ale en Pucón y de reírnos mucho además de pasar el calor y salir hasta con ropa nueva puesta de una tienda china, llego al hostel pensando en tomar mate, comer algo y dormir. Pero al lado hay tremenda fiesta. Está nada menos que la celebración por el aniversario de Pucón y el orfeón de carabineros (la policía chilena) es el encargado de abrir. Desde mi habitación se escuchan canciones de Queen y los Beatles tocadas por ellos. Nos reímos con mis compañeras de habitación y con un francés que no entiende nada. Entonces dejo mi bolso y obvio que salgo a la fiesta, que está a una cuadra, casi en el patio del hostel. La gente llega hasta con sillas plegables para tener el mejor puesto y está muy chistoso porque en medio sube un carabinero cantante y entona junto a la orquesta -coreografía mediante- ciertas cumbias clásicas e incluso perrean y hacen giros. En el público hay mucha alegría y en la orquesta también. Es bello verlos en una actividad que no tiene que ver con orden, rigidez o represión y el animador hace bromas diciendo que se comprometen a no pasar partes (multas) durante el fin de semana, mientras un chico que está a mi lado grita fuerte: «y que dejen tomar!» -todos soltamos la carcajada porque en Chile no está permitido beber alcohol en la calle. La fiesta continúa con otros cantantes y grupos folklóricos hasta tarde. Al regresar al hostel cuando ya comí mi sandwich y estoy por preparar el mate, un amigo me escribe y me pregunta que por qué voy a San Martín y no fui a Puerto Varas si le dije que me gusta tanto. -Porque tenía ganas de sur pero de algo desconocido, de algo nuevo- le cuento. -Ah, tú y tus aventuras y eso de dar el salto; te estarás riendo con mi pregunta taurina, ¿verdad? -me responde. -Jajaja, antes de que la hicieras, casi; pero está bien, otras veces tengo ganas de refugio, de algo que ya conozco y me encanta; ahora necesitaba probar y renovar… Después voy por mi mate y llega un inglés a conversar aunque el ruido de la fiesta no permite mucha fluidez. Lleva más de un mes en Chile visitando gran parte del sur y las lecherías porque voenen de una familia de granjeros dedicados a esto. Le pregunto si él toma leche -quiero saber si sabe que no es tan sana. Se ríe y me dice que sí, que por las mañanas y me mira con cara suspicaz, pero no seguimos el tema porque hablamos también de baile y me dice que tomó clases de bachata y salsa en Inglaterra. Me río montón y le cuento que en el festival de Viña está el rey de la bachata, Romeo Santos; enciendo la tele que está ahí entre la cocina y el comedor y lo ve, le digo que a mí no me parece guapo pero que las chicas mueren por él y que es ultra famoso. Se queda mirando un poco hasta que canta una clásica de él y la tararea en su spanglish al tiempo que me saca a bailar y me sorprendo porque baila mejor que varios y ambos nos reímos mucho con la aventura danzante. Cuando termina la canción me dice que nunca pensó terminar bailando bachata en la cocina de un hostel en Chile, seguimos riendo, mientras recuerdo la música y el baile en el comedor del hostel de Montevideo donde pasé unos meses en 2009.

Al día siguiente, al llegar a San Martín nuestro trío dinámico se deshace y Héctor me deja sus datos por si necesito algo y me dice que sus hijas me van a buscar a cualquier parte en auto, mientras Carmen se despide entre más bromas. Cuánta ternura y bondad en un solo viaje. Ya con el equipaje me subo a un taxi y le pregunto al chofer, ¿eres chileno?- porque su acento no me parece argentino. -Sip, me trajeron de chiquitito, pero tengo el acento de mis papás -me cuenta y conversamos un poco hasta el hostel. Una vez en mi nuevo lugar, al volver por la tarde-noche después de pasear y comprar para cenar algo liviano, descubro que comparto habitación con otra compatriota y tres argentinas. Una de ellas, Vero, me dice que irá a cenar y que si quiero ir, entonces cambio mis planes y caminamos hasta un bar frente a la plaza con una agradable terraza. Al poco rato un par de perros negros labradores muy bellos que se acercan a la mesa  pero no se cotentan ni con toda la pizza que les compartimos ni con el trozo de bife que les toca y quedan mirando al segundo a ver si hay más. Nos da mucha risa. Nos contamos la vida con Vero, que se vino al sur desde Buenos Aires y tiene su trabajo de psicóloga; coindimos en la visión de trabajar para vivir y disfrutar en vez de vivir para trabajar que es lo que el sistema promueve por siglos… Al llegar al hostel con el aire frío pero el cielo muy estrellado nos sentamos un rato con un par de argentinos que hacen un viaje muy improvisado (quieren acampar en el parque nacional pero recién comprarán lo necesario, incluida la carpa) a tomar un té y reírnos de cada uno y hasta hablamos un poco de astrología muy en juego… La vida fluye, los encuentros, las sincronías y sintonías también, mientras agradezco y me preparo para mirar un poco de ciertos trabajos que quiero comenzar a hacer y también algo de nuestro ritual de otoño (el sábado 28 de marzo), energía que se asoma por acá poco a poco en las hojas que empiezan a lentamente a girar hacia verdes más claros y el sol esta mañana ya no está tan fuerte. Hasta el próximo salto.

Lago Lacar, San Martín de Los Andes

Lago Lacar, al caer la tarde, en San Martín de Los Andes

Decisiones conscientes

Mi nuevo amigo en el barrio es… turco! jaja; se llama Burhan (‘como el de la teleserie’, me dice), tiene una tienda y lleva poco tiempo en Chile; hablamos de Estambul, de Capadocia y de su especial cultura, de cuán en casa me sentí cuando estuve unos días por su tierra este año; también conversamos de Chile y de cómo somos… Qué risa cómo la Vida te conecta con humanos todoaquello en lo que estás vibrando (desde hace poco más de un año Turquía me aparece a cada rato con distintos gestos), por eso -entre otras cosas- es importante tomar atención a nuestra energía, detenernos a ver en qué estamos, y percibir cuándo estamos en alegría/amor/agradecimiento/paz/aceptación versus miedo/rabia/pena/pesimismo/crítica… porque obvio que la Vida nos conectará con aquello, aunque seguro también nuestros guías nos mandarán señales y opciones para elevar nuestra vibración si estamos en algo más bajo u opaco, pero tomarlas es decisión nuestra…

Estos días hemos hablado bastante de esto en la lectura de carta astral. También lo compartimos en la charla del Congreso de terapeutas florales al que fui invitada el sábado pasado a conversar sobre reencarnación/propósitos del alma/astrología… Hablamos de nuestra decisión. Cualquiera está bien: decidir ser agresivo o pacífico, víctima o victimario, consciente o no, rígido o flexible, miedoso u osado… Da igual. Muchas veces lo importante es tomar la determinación, actuar en coherencia y asumir las consecuencias. Hay mucha gente que ha decidido no crecer y está perfecto. No pasa nada, es una experiencia. Y cuando decides lo contrario también es perfecto, ojalá seamos consistentes y seguro vienen otras consecuencias, no mejores ni peores, sólo que es otra vibración…

Desde esto, las decisiones, qué días potentes nos trajeron la cita de Marte y Plutón a mediados de noviembre: todas las verdades sobre la mesa, mucho poder interior y… Cierres. Ahora el cielo nos da un «semi» respiro, mucha limpieza, más claridad y una gran posibilidad de mirar más profundamente en qué estamos y qué necesitamos, para luego, desde el 14 de diciembre y hasta el 7 de enero con fuerza, retomar la intensidad de este ciclo y poner a prueba nuestra sabiduría, a ver si por fin nos decidimos a ocuparla cada vez más… Diciembre será otro eslabón de cierres e inicios, aunque este año realmente termina en marzo, a mediados.

Asistida por guías de esta dimensión y de otras más sutiles, comprendo que este tiempo no tiene que ver con grandes temas antiguos o demasiado profundos, este tiempo -para muchos- se centra en la verdad de lo que somos hoy. Los meses 2014 han sido tan vertiginosos, que claramente no somos los mismos de abril cuando comenzara nuestro centrifugado, ni menos quienes éramos en 2013 durante nuestros potentes procesos de lavado. Obvio que el día no dura 24 horas ni 16 tampoco, ahora dura menos. Cada mes parece un suspiro, todo se acelera y el ritmo -como lo he dicho antes- está vertiginoso y aquello que antes podía gustarte ahora puede que no y al revés. Encima ahora nada se pega con chicle, la verdad aflora sí o sí y nadie puede jugar a que está todo bien en una situación que por debajo huele mal o tiene basura… Ya no. Y cuando quieres mentirte a ti mismo todo se confabula para que asumas y hasta no puedas llegar a aquel lugar al cual ibas por compromiso o con fastidio… Lo que es es y lo que no, no. Parece simple, pero a ratos puede ser crudo. Quedan muchos en el camino de cada uno y varias situaciones que ya fueron no hay cómo maquillarlas o rescatarlas.

Y al mismo tiempo, estos meses de tanta verdad e incertidumbre abren nuestra consciencia y también el goce. Hay demasiado que disfrutar ahora. El canto de los pájaros, el cielo con otro brillo, un ritmo vibrante y cadencioso si te detienes a mirarlo, bellos gestos de amor que saltan a cada instante, la creatividad y osadía de tantos… El sábado pasado, como cada año (una de las pocas tradiciones que sigo conservando en este ciclo), fuimos con Silvia -amiga argenti-chilena– al bazar internacional de las damas diplomáticas en Santiago. Creo que es como el octavo año que voy y hace como tres que llegamos con Silvia al parque y ella también lleva los mismos que yo disfrutando de un sábado de primavera con comida, colores, artesanía, baile, música y gente de todos los rincones. Allá, pese a que esta vez hace frío y finalmente llueve, nos encontramos con otros amigos y vecinos de Chile y otros lados; saboreamos platos de Indonesia, Thailandia, Palestina, Uruguay, Perú… En esta versión hay comida turca a cargo de… Onur, jaja, mi amigo del Meze, el nuevo restaurant turco del barrio, nos saludamos con mucha alegría y conversamos un poco mientras prepara el clásico döner kebab. Todo fluye, hasta la lluvia, los regateos en los puestos de artesanía, la risa, la música mexicana, árabe y china; los niños revoloteando. Uno de ellos, un pequeño de unos dos años y algo se acerca directamente a nuestra mesa y nos mira con sus ojos grandes justo cuando a mí se me cae la lagrimita de emoción al contarle un logro vivido recientemente a Silvia. Detrás de él llega su abuela finlandesa que no habla nada de español y que no sabe cómo sacar a su nieto de nuestra mesa; finalmente le ponemos una silla a cada uno y todos compartimos… Energía nueva, pura y abierta se muestra como señal que me reafirma este nuevo ciclo en el que estoy, al igual que muchos.

La energía nueva también se me muestra en los preparativos que ya comienzan para nuestro Ritual de Cierre 2014, que será el sábado 27 de diciembre (reserve la fecha para encontrarnos y despedir el año con amor), donde el escenario se nos movió a varios, pues parte del centro donde lo hacíamos está dañado por un incendio reciente… La vida con su limpieza e intensidad nos hace practicar flexibilidad, fragilidad, empatía, valentía, creación…  Ya les daré más detalles del ritual en las próximas notas.

Estas dos semanas que vienen, la energía del cielo nos estimula y nos propone lograr más, no desde la ambición solamente, sino desde el entusiasmo, la creatividad, la magia y la decisión. Hay mucho potencial en especial hasta el 9 de diciembre para que conquistemos logros desde el placer y el juego; se trata de divertirnos y hacer gestos para manifestar desde nuestro corazón.

manos1[2]El inicio de diciembre marca mucho entusiasmo y energía antes de las últimas vueltas de la centrífuga 2014. La segunda quincena removerá otros eslabones que tenemos pendientes y nos seguirá revelando verdades. Por ahora, estos días, usemos más nuestra genialidad, riámonos de nosotros mismos, salgamos de ruedas de crítica-queja-desconfianza-envidias, gocemos de lo simple y vayamos más allá de nuestros temores: podemos osar, probar nuevas formas y dar significativos pasos… Y para comenzar un mes donde los guías dicen se abre el corazón podemos partir por hacernos un regalo -cualquier detalle que nos dé alegría- y comprar otro con papel y todo y dejarlo en un espacio público para que alguien lo disfrute, o entregarlo a alguien cercano sin motivo… Al amor se lo puede alimentar y hacerlo circular, como enseña la tradición andina a través del Munay donde podemos «fabricar amor a voluntad» y ofrecerlo a todos los seres… Como lo señalaba al principio, aquello en lo que vibramos es lo que atraemos, así que todo el rato podemos probar qué sucede en nuestras vidas si vibramos amor puro… Muchas veces lo hemos hecho, sólo que ahora en este diciembre podemos decidirlo con más consciencia sólo por experimentar, sin afán, desde el disfrute y la entrega. Veamos cómo nos va…

Regalos para florecer en Primavera

De su viaje al desierto de Chile, Felipe me trae de regalo una pequeña llamita que se puede poner en el refri pero que prefirió instalarse en mi altar, al lado de una mariposa turquesa thai. Del ritual de invierno pasado, Patricia me entrega una exquisita crema de manos de cereza y avellanas y me dice que olvidó entregármela y me la guardó con todo su cariño hasta ahora. Por mensaje, Pame, que tiene su pyme de decoración de eventos (desde cumpleaños infantiles hasta desfiles de moda), Ornamenta, me dice que me trae de regalo algunos carteles para indicar los espacios de comida y el sector del bazar, me da alegría y sé que es todo un esfuerzo porque ha estado muy exigida estos días. Casi comenzando el ritual, Silvia me entrega una pulsera azul con pequeñas hamsas o manos de Fátima porque sabe que me gusta este símbolo, las amé (a las dos) y la dejo como protectora en la mesa frente a mí… Todos me dan emoción y ternura… Qué bello es recibir! Y cuando ya tengo cuatro obsequios antes que empiece el Ritual de Primavera, al final me llega otro más: Rodrigo , me trae una sabrosa galleta integral de avena, naranja, jengibre que acompaña mi mate de esta tarde…. Cuando me la entrega, además de honor y cariño, siento: parece que este ciclo traerá muchos regalos para todos, qué bien… Sí porque estamos todos en una conexión y quienes vienen a estos encuentros o son pasajeros de este blog nos sintonizamos y hacemos el viaje juntos, lo que te pasa a ti me está pasando a mí también en alguna dimensión o intensidad… Nos acompañamos y sintonizamos… Y ahora es más tangible que nunca antes….

Cada Ritual que hacemos aunque tiene sus pasos un poco estructurados pues, por ejemplo, para mí es básico partir saludando a los ancestros y también a los protectores del lugar, también tiene su propio sello tanto porque lo que generamos entre todos y quienes asisten y que producen una energía especial, como porque el ciclo astrológico también provoca una vibración y contexto particular… Pero hay algo más… Cada vez que nosotros hacemos algo -cualquier cosa- podemos poner una intención de forma consciente, y al revisar lo que puse como intención de este encuentro en una de las FLYER PRIMAVERA 2014imágenes, en que usé de fondo el desierto florido de Chile, no sólo  la energía se materializa y me llega el regalito de Feli desde allá, también la música del norte se hace presente en este ritual y, por cierto, la frase que me llegó: «Es tiempo de aceptar, renacer y crear»

Y sí, en este ritual se presentó esa energía y mucho más. A medida que fueron llegando y cuando ya comenzamos sentí nuestra pureza y también un poco de energía algo apretada, algunos miedos y angustias dando vueltas, nada raro. Somos así. Lo bello es sentir cómo ese miedo -o suspicacias- a medida que les das espacio van aflojándose y disolviéndose porque también en este ritual se palpaba la valentía de muchos de venir por primera vez y en algunos casos solos, consigo mismos, la mejor compañía que podemos tener: nuestro corazón y todo lo que somos… La energía, se va transformando y a los pocos minutos ya nos sintonizamos con el amor y la consciencia de forma muy potente y dulce a la vez… También porque el amor para cada ritual se presenta desde antes…

La semana pasada, después de ir a un festival de danzas circulares, en que la vecina Lily me avisa pero yo tengo otros compromisos por la mañana y de tarde ella, que sabe que amo la música y el baile, me insiste en que vaya porque me dice que está muy lindo, agarro un taxi y parto por la tarde en un sábado de nubes oscuras. Allá me encuentro con gente conocida además de Lily, la música me confirma lo que yo venía sintiendo para el ritual y lo que he vivido este invierno: conexión con nuestra tierra, la sanación del sur y la alegría más libre del norte. El salón está decorado con grullas de origami, que se ven muy bellas con la luz cayéndoles al centro del círculo… De vuelta regresamos un tramo caminando y Lily me ofrece algo: «Jime, si necesitas algo para el ritual, algo manual, yo estoy disponible, puedo hacer de estas grullas, demás que aprendo o lo que necesites, en serio» -le agradezco mucho y yo, que estaba sintiendo lo del florecer, al día siguiente le digo: Veci, te cobraré la palabra, de tus manualidades para el ritual, podrás? -Y ella, que es aplicada en seguida se pone practicar lo de las grullas, que desde la primera le queda bacán. Cada uno con sus dones, ¿verdad? Y le digo, jaja, pero yo tengo otra idea: necesito flores, porque vamos a florecer, entonces ¿puedo pasarte los papeles y los moldes? Y dice: Sí, Jime, yo las hago no te preocupes; y hasta me manda fotos de los avances de su ofrenda para este ritual… Le agradezco infinitamente y compruebo cómo se provoca una cadena de amor cuando nos atrevemos a pedir ayuda… Las flores de  Lily floresahora viajan con gran amor y creatividad por cientos de corazones… Lo mismo sucedió cuando pedí ayuda en el post anterior porque varios de quienes siempre trabajan en cada ritual esta vez no podían y en cuanto publico la nota me responde una fiel pasajera de este blog, Patricia, quien queda encargada junto a Cote del altar, y luego escribe Erika, que recién se a une a este viaje porque escucha la sección de astrología en radio Cooperativa  y viene feliz con su marido Víctor y ayudan en cada detalle desde temprano… Y como ellos, varios se unen con su trabajo y presencia desde simplemente estar disponibles para lo que sea hasta irnos a buscar en auto para traer todo lo necesario. También se une Marilyn que unos días antes me pregunta si podría venir con su nuevo arte y práctica: pinta budas a mano, lo que además de ser su propia meditación, la tiene reconectada con sus talentos, la belleza y el arte… Y le digo que sí puede venir porque este tiempo es para atreverse y también para unirnos y hacer que la energía circule… Cuando recapitulo todo esto siento cuánto amor y poder reside en cada uno de nosotros… Así, la ayuda llega y todo fluye para que esto sea lo que es: un encuentro con nosotros mismos, un rito para honrar lo vivido y abrir lo que viene, un espacio de conexión, una fiesta para el corazón…

Somos muchos, alrededor de 240 entre todos, y hay desde varias guagüitas -bebés- de meses hasta los abuelos con sus cabellos más blancos y la mirada más reposada… El círculo pulsa, vibra: pura vida, unión… Amor… Son muchas las emociones que limpiamos del invierno intenso y el aprendizaje que poco a poco logramos atesorar también es creciente… Nuestro despertar está circulando y empoderándose cada vez más… En el ritual nos detuvimos, recordamos, recapitulamos, ofrendamos con nuestro baile y energía, compartimos, saludamos a la señora Primavera e hicimos un ejercicio que tiene un gran sentido: salimos de la víctima…Cuando logramos aceptar lo vivido y comprender -aunque sea por unos minutos- el sentido de los dolores que hemos vivido, damos un paso que puede parecer pequeño pero que es un gran salto que nos transforma. Sin víctima no hay victimarios, no hay personas o situaciones que nos dañen, sino que hay seres y espacios que aportan a nuestro crecimiento aunque a veces no lo entendamos ni nos gusten… Hay experiencias que creamos y que podemos transformar…

En este Ritual y durante estos meses impulsamos la energía de aceptar profundamente el dolor como parte de la experiencia humana y lograr ver y sentir que cada hecho incómodo, doloroso, frustrante, es también una semilla de amor a nosotros mismos, una partícula de polen, una fuente de vida, que puede viajar y hacer florecer el desierto más seco del mundo… No es una tarea fácil, pero es bella y cada día somos más viviendo de otra forma y comprendiendo que no hay casualidades, que cada hecho forma parte de la malla energética de la que somos parte, que cada pasaje de este viaje es preciso y mágico, que la crisis es sólo una aventura más y que a cada rato hay regalos… De hecho, al centro de nuestro altar pusimos -porque es así- a nuestro corazón, representado en otro regalo: un corazón de cristal murano que Moni me trajo de Italia de regalo durante el invierno y que ahora se sintonizó con el ritual desde esas tierras donde está realizando un sueño: estudiar arte en vez de seguir la vida rutinaria y segura de ingeniera… Sí, son tiempos para atreverse y el cielo con todo su movimiento nos dice Sí, dale, todo es posible en tu vida ahora…

altar primavera2

Nuestro altar para honrar a la Primavera 2014

Así es, todo lo que somos y todo lo que importa está en nuestro corazón y los movimientos astrológicos bendicen este proceso y los planetas celebran porque saben que ya nos estamos atreviendo y contagiando a muchos… Recibiremos muchos regalos estos últimos meses del 2014 que, aunque nos ha machucado y mareado un poco dentro de la centrífuga, también nos da la mano en medio del vértigo y nos ayuda a encontrarnos con quienes tenemos que encontrarnos, a sentir la protección de nuestra corazón a través de la presencia incondicional de guías y maestros que nos dan señales y nos muestran el camino… Un 2014 que en su último tramo nos anima a florecer, a darle vida a nuestra semilla con toda su originalidad y pureza, a reconectarnos con la «simple profundidad» de nuestro Yo Soy… Un tiempo luminoso que nos invita a renacer desde el soltar pesos y ponernos más livianos y que, desde ya, está dándonos múltiples regalos cuando menos lo imaginamos! A recibir, aceptar, renacer, crear y florecer con todo lo que somos… Todo. ¡Feliz Primavera 2014!

Y acá unas fotos de nuestro ritual, aunque varios no hayan podido venir, les enviamos con estas imágenes toda la energía de conexión y amor para que florezca en todos los rincones y corazones! Graciaaas!

DSCN9573

El equipo ritual, activando la intención de amor y el fuego del altar

DSCN9614

DSCN9654

¿Adelantarse?

relojchileChile cambia arbitrariamente de hora y adelanta el clásico horario de verano que antes comenzaba la segunda semana de octubre y hasta la segunda de marzo. Hace rato que los gobiernos «juegan» con el tiempo, y la primera vez que lo hicieron -con la excusa del terremoto- casi no tuvimos meses con horario de invierno y -según yo- sincrónicamente algunos fenómenos sociales (protestas sobre medioambiente, estudiantes, trabajadores, accidentes) se aceleraron… Y ahora otra vez, encima con Luna Llena, que suele alterar a las masas, también a nuestro cuerpo y emociones…

…El sábado por la tarde-noche, mientras caminábamos con una vecina-amiga hacia la Noche de Colores, una feria de diseño-artesanía-música-gastronomía-antigüedades, en el barrio Italia de Santiago, me dice cuando vamos riéndonos comentando una telenovela turca (en Chile están pasando tres dobladas por chilenos….): Jime, tengo que decirte algo: Pequé!…. Me metí a Youtube y vi los capítulos que vienen! -me dice con la cabeza agacha y culposa. -Noooo! No se te ocurra contarme nada -le digo tapando mis oídos.- Y seguimos riendo, mientras me cuenta detalles de su incursión en internet sin doblaje, sino en turco, ja. Nora, otra amiga, hizo lo mismo en marzo cuando esta telenovela comenzaba y además la vio con subtítulos griegos y también nos dio risa porque sus ancestros son de por allá e igual no entendió nada pero vio escenas sabrosas. En fin. Una vez en la feria, después de disfrutar los colores intensos del atardecer  y los aromas de la casi primavera, al caminar en medio de los puestos, nos encontramos con otra bloguera, Chimuchina, que hace poco regresó a Chile después de vivir varios meses en la selva peruana. Hablamos de todo un poco, y al final sobre Santiago y su aroma a consumo y que ella siente que la gente está mal en las ciudades grandes, que hay mucho stress y energía plástica… Coincidimos, pero también le digo que siento que estamos llegando a un extremo que comienza a revertirse y que hay ciertos gestos como cuidar en algo lo que comemos, comenzar cultivos propios, valorar lo tradicional, o dejar de ver en las calles a los bebés con la mamadera (biberón) con Coca-Cola -¡$%&#*$%&!- al menos a mí me da esperanza… Siento que comenzamos a despertar y que como sólo es el comienzo las fuerzas antiguas pujan por mantenerse, pero ya muchos se dan cuenta que tener y tener cosas nuevas e ir rápido es tremendo espejismo…

correcaminosEsa ansiedad y prisa nuestras de cada día son tan propias de la idiosincracia chilena y tan humanas también. La he visto en varias nacionalidades y nos hemos reído mucho de cómo nos cuesta aceptar lo que sucede en el presente, de cuán neura nos ponemos… La semana pasada en la consulta dos chicas se adelantan erróneamente a lo que les voy a decir en una parte de sus cartas astrales y a ambas les tengo que decir: respiiiiira, no te adelantes, porque si lo haces te pierdes la magia. No te iba a decir eso a lo que tu ego se anticipa, y aunque así fuera, te pierdes de la experiencia porque no es lo mismo oír a tu mente repetitiva y que cree que ya sabe, a incorporar la vibración que una extraña como yo pone en tu campo de acción… Déjate sorprender.- Y luego nos reímos porque es costumbre de ellas adelantarse, terminar la frase, apenas y acomodarse en la silla porque ya están pensando en pararse… Entonces nunca nos relajamos si vivimos así. Nunca estamos presentes. Estamos en el futuro ilusorio. Estamos en tensión y constantemente cumpliéndonos a nosotros mismos los deseos del ego (incluidos los incómodos o catastróficos) en vez de permitir que la Vida nos asista y nos guíe…

El sábado almorzamos con otra amiga y vamos a comprar comida para llevar a su casa. Me doy risa porque hay fila y me pongo impaciente. No por hambre sino por la lata de hacerla. En ese rato nos ponemos al día, hacemos bromas con otra gente que espera y con la señora que atiende, e igualmente estoy consciente de cómo mi cuerpo entró en tensión al tener que esperar y sentir que nos estamos demorando mucho… Al final la comida está muy buena y barata. Por eso la fila, jaja.

Hace unos meses, alguien a quien no conozco me llama una mañana de sábado al celular, muy acelerado, no para de hablar y ni siquiera me pregunta si yo, que figuro desayunando frente al lago Llanquihue, puedo hablar. Sigue y yo me pregunto cuándo se detendrá y me preguntará si puedo conversar. Al final no lo hace. Oigo su monólogo y hasta me desconecto unos segundos y dejo de escucharlo. Siento pura energía vacía-mental-desconectada (del corazón, obvio). En eso en el café en el que estoy a uno de los mozos se le cae un vaso y se escucha el ruido. Agradezco la señal (o confirmación) porque la llamada es para invitarme a un evento al que se supone debiera sentirme halagada de estar. Le digo: gracias, pero no, no me interesa, no voy-. Sólo entonces su energía se detiene y me pregunta por qué. Casi le digo «porque tú mismo me has dado la respuesta», pero le explico -entre otras cosas- que no tiene nada que ver con lo que yo hago ni con cómo miro mis oficios y que siento mucha energía antigua en lo que me dice… Cuando cuelga, agradezco que haya sido tan obvia su energía y que mi sensación haya sido de tanta certeza porque de lo contrario una parte de mi ego podría haber sido seducida por los elogios o el afán de mostrarse, pero no… Además de no creer en su empresa, siento que con esa vibración tan acelerada y poco empática no tengo ganas ahora de comenzar nada… No es una buena semilla para mí en este presente. Capaz que en otro momento ni me diera cuenta, pero ahora el trabajo interior, las sincronías y la consciencia se unen para mostrarnos cosas, como a muchos se nos están revelando verdades internas y externas…

Estamos más grandes, ¿verdad? Por lo mismo, ojo con creerse ciertos hechos y mensajes mediáticos, incluidas las bombas o supuestos conflictos internacionales o crisis económicas; es tiempo de observar desde la neutralidad y de mirar bajo el agua, no podemos caer en el juicio apresurado ni en el miedo de otros momentos de la humanidad, porque esa emoción, el miedo, esconde -y genera- violencia… Así como el adelantarse tiene también un dejo de agresión, de rabia e impaciencia…

Semanas después, alguien a quien amo y que acostumbra a hacer sus cambios afuera (en acciones como remodelar la casa, comprar cosas nuevas) en vez de cultivarse interiormente, me cuenta que quiere cambiar su auto porque si no lo hace bajará mucho su precio en el mercado y como tiene un dinero guardado quiere invertir en eso. Su auto está bueno y él no tiene demasiada plata, al contrario, tiene un empleo precario. -Te diré dos cosas -le aviso-, primero, sal de esas creencias del sistema, esa es pura manipulación del mercado -creado por nosotros mismos, obvio- para que consumamos más, si te lo crees lo creas, si no te enteras, puedes cambiar la realidad y demás que alguien paga bien tu auto cuando sea el momento o las circunstancias cambian cuando sueltas los miedos colectivos. Segundo, ¿estás aburrido?, porque claramente podrías conservar ese dinero e invertirlo en cosas más productivas que un auto nuevo que no necesitas, incluido un viaje o un taller de algo, ¿no te parece? – le digo al teléfono mientras se ofusca un poco.- Luego conversamos un rato de cuánto nos cuesta aceptar esos momentos en que aparentemente «no pasa nada» en nuestras vidas y cómo nuestro ego trata de evitarlos a toda costa porque es amenazante conectarse con ese aparente vacío y el valioso silencio… Entonces buscamos compras, intensidad, actividad, problemas, información, drama, etc..

lotothaiAhora, con Saturno en sus últimos meses de descanso en el fango escorpiónico, llega el tiempo de quedarnos más quietos para sumergirnos en nosotros mismos, en nuestra psiquis y en la poderosa intuición que todos tenemos… Vendrán valiosos frutos para quienes decidan entrar cada día más en quietud activa, es decir, en estar atentos a permanecer y a observar cómo somos, cuán valiosos, complejos y chistosos somos… Adelantarnos impide esta conexión interior y aunque nos da la sensación de estar más vivos es una gran trampa que nos deja cansados y más aislados… Aceptar todo lo que está sucediendo sin huir ni querer solucionarlo de inmediato es tremenda llave de crecimiento y de consciencia. Es en esos momentos cuando una brecha de luz se abre y nuestros dones se activan con más potencia

Obvio que habrá urgencias que exigirán ir de prisa, pero practicar el permanecer nos dará más creatividad y sabiduría para los momentos «urgentes»… Mientras termino esta nota, en la tele anuncian un programa de entrevistas donde el conductor casi nunca escucha a sus entrevistados más de un minuto y los interrumpe o se adelanta, y a mi me da entre risa-pena-cansancio, entonces no lo miro porque siento tensión y me pregunto porqué nadie le pide que respire un poco… Luego hay un aviso de ropa que dice que hay que adelantarse a la primavera… -No poh! Si primero hay que despedir al señor invierno- digo… Por eso, queridos pasajeros, les ADELANTO que el ritual de Primavera llegará un poco más tarde, pero llegará. La tarde del sábado 4 de octubre nos juntaremos a celebrar en Providencia… No se adelanten y sólo reserven la fecha para encontrarnos otra vez a honrar todo lo vivido en estos transformadores meses de 2014… Nos vemos luego!

Abril, centrifugados mil

… Puede sonar liviano, pero lo diré igual… Parte de lo bueno de que se te mueva el piso (siempre hay cosas positivas en medio de una tragedia) , es que te reconectas  -tienes la oportunidad, digo- con el presente… Con el cuerpo, con la consciencia, con la mente lúcida, el corazón; de una. rayostormentaSin aviso ninguno, el rayo mágico de Urano -planeta que rige los terremotos, las tormentas eléctricas, los impulsos nerviosos, las revoluciones, los adelantos y la intuición telepática, entre varias otras cosas- entra por nuestra coronilla, nos sacude y nos dice algo así como: ¡Ey, despierta, estás aquí, tu piso se está moviendo y tienes que cambiar ya de estado, no puedes seguir igual, no puedes seguir en tu versión antigua (infantil, muchas veces) de vida, muévete! … Encima ahora (desde 2011) está en el fuego impaciente de Aries, así que no nos lo dice, lo grita como una orden urgente a toda la humanidad… Y como tiene humor irónico y es impredecible, para despertarnos nos pone una que otra protesta en distintas partes del planeta, terremotos e incendios varios, tormentas y vientos espectaculares , conflictos políticos que arden, caídas de sistemas computacionales, accidentes aéreos, mucha creatividad en alza, y una sensación de incertidumbre en el aire…

E incluso con el dolor, la frustración, las urgencias por resolver y el miedo a cuestas que puedes sentir, especialmente si estás -tú o tu círculo- ahora en el norte de Chile, con los recientes terremotos pegados en la piel y en la vibración personal y nacional, pues todo Chile está tembloroso, al menos varios con los que conversamos estos días, podemos palpar el regalo que subyace al movimiento amenazante de la Tierra: Estamos más vivos y despiertos que nunca.Y eso es demasiado decir. No siempre tenemos esta mega oportunidad de reabrir los ojos, los sentidos, los canales, el corazón; al momento actual, a la vida que llevábamos y a la que queremos reconstruir, a lo que nos toca ahora resolver, a todo lo que guardábamos bajo la alfombra o en los «pendientes», a los seres humanos, animales y sagrados que nos acompañan incondicionalmente, a aquellos que ya no lo hacen o se alejan justo cuando se supone debieran estar, lo cual también está dentro de una perfección que sólo el alma conoce… A quiénes somos realmente en todas nuestras dimensiones… Hoy  en el aire de este sur del mundo -pese a lo que muchos crean y critiquen-, al menos para mí, hay más presencia, por tanto más consciencia… Tremenda sanación para quien quiera mirarla como tal…

El terremoto es interior

El viernes a media tarde, cuando todavía no almorcé, camino a casa disfrutando el sol tibio. Después de otras compras, paso a la verdulería del barrio y Juan, el chico que atiende y siempre me busca la broma, me dice que cómo estoy con los temblores… Conversamos con él y la dueña de cuánto nos toca cambiar y aprender, también de los medios de comunicación y su rol… En eso me dice que no toque todos los tomates, por favor. -Ya, no me retes, si no los aprieto, sólo los miro con la mano, jaja; si no soy na’ lesa (necia) como la señora del otro día -le digo provocándolo porque hace poco una señora mal genio no lo escuchaba y él se irritaba. -¿Y ese melón que está partío, es pa’ los clientes? -le pregunto pa’ molestarlo. -Claro, estamos haciendo degustación -afirma con picardía-. Y entonces, sin saber cómo ni cuándo, figuro sentada al lado de la caja comiendo un sabroso trozo de melón como aperitivo y conversando de la vida, del norte de Chile, de nuestro consumismo, del apego, del dolor, de los cambios que tiene que hacer Chile… Y de que quizá viene algo más para esta tierra…

Muchos sentimos que viene algo más acá o en otro lugar, o a nivel global. Y como ya lo tenemos en casa, en el caso chileno, nuestra energía está muy alerta… Recuerdo que a fines del año pasado, con un par de amigos conversamos de Estados Unidos y que lo que viene puede tener mucho que ver con ellos este año, aunque con los amigos gringos parece que siempre hay que darle una vuelta a la información porque luego descubres que al atentado «x» no era tal, o que la llegada a la Luna es como de cartón (así la veo yo, al menos) y que curiosamente nunca más repitieron la visita, etc… Vaya que es enredado el ego cuando se siente muy poderoso y quiere mantenerse como tal… O quizá eso pasa cuando tomas mucha Coca-Cola, jaja.

lavadora tierraPero el cielo no miente: este abril, trae una intensidad que ya corroboramos y que no se detendrá. Y es una tremenda oportunidad… Honorables pasajeros de este blog, comenzamos ya el Centrifugado 2014. Nos pasamos el 2011 y 2012 sintiendo el efecto de los cambios y comenzándolos de a poco, en casos a regañadientes; el 2013 fue el llamado obligatorio a iniciar por dentro el proceso de lavar el ego, una y otra vez, de ser más coherentes, de tomar el compromiso de hacer otra vida, de sanar, de compartir nuestros dones en vez de seguir dudando…Y ahora, con Saturno (realidad) sumergido del todo en Escorpión (agua fija) podemos sentirnos algo empantanados porque vaya que duele asumir el lado oscuro de cada uno, además de aquello en lo que estamos pegados y que en algunos casos nos lo quitan de raíz para poder transformarnos. Pero también don Satur nos tiene más profundos y, por otro lado, estamos más vivos dada la tensión entre Urano (revolución), Plutón (transformación desde la oscuridad hacia la luz) y Júpiter (sentido de vida)… Todos estos grandes del cielo nos preguntan -como lo he dicho antes- ¿te gusta tu vida, tiene sentido lo que estás haciendo? Y si la respuesta es no: «Entonces, chiquito(a), ¿qué vas a hacer HOY para comenzar a escribirla de nuevo, a enfocarla en nuevas direcciones, a vivir como alguien más grande, más evolucionado, ah? Porque no te vamos a esperar. No vamos a esperar a que estés listo, a que sea el momento preciso, a que tengas el dinero, estés con más ánimo, con menos kilos, o más claro… No, la acción es ahora!»

Por eso el cambio -el terremoto interior y exterior- duele. Porque el ego se resiste a soltar aquello insano o caduco en lo que está cómodo. Y abril nos pone frente a esto con cierta crudeza, especialmente desde el 15, con el eclipse de Luna en Libra, que «coincide» con el movimiento retrógrado de Plutón. Ambos hechos nos harán un «stop» sobre nuestros vínculos más íntimos, nos harán mirarnos en éstos y en muchos casos dejar de criticar afuera para mirar con responsabilidad dentro. También nos detendrán en nuestras ambiciones, logros, carrera, imagen social, manejo del dinero.Y es -de nuevo- tremenda oportunidad: pueden salir aún más verdades a la luz. La Luna llena se asomará en el signo que nos contacta con los demás y puede agitar, de paso, las masas en torno a ideas políticas, de justicia y de asuntos bilaterales. Ese día, el 15 (y hasta el 24), es bueno al levantarse enviar desde el corazón las gracias a todas las relaciones de nuestra historia personal de esta vida y las anteriores, que tanto nos han enseñado desde el dolor y desde la plenitud, abrazarlas y soltarlas con amor. Es un momento poderoso para soltar enganches del ego en las relaciones en torno a «lo bueno o malo que fue», porque precisamente todo eso ya fue y nos quita luz para hoy… Y a medida que avanzan los días podemos mirarnos en nuestros roles en el trabajo, los estudios, la familia ¿qué papel representamos y en cuál estamos pegados, sin darnos el permiso -o la aventura- de probar cómo nos va desde otra vibración?

Pero por mucho que los cambios sean ahora, no podemos movernos desde la ansiedad e impulsividad, mucho menos por revancha o control, obvio: se trata de ejecutar con consciencia, de definir y concretar desde la conexión interior; por eso antes hay que detenerse porque así podremos respetar también las condiciones del contexto de cada uno…

Sólo unos días después del eclipse, en el cielo se dibujará una gran cruz entre cuatro planetas, de la cual espero poder escribir en el próximo post… Por ahora, me quedo viviendo día a día de este abril que nos sacude la humedad (emociones), puede estrujarnos y también darnos la temperatura adecuada para comenzar de otra forma, «reformateados», más limpios, más libres, aunque sacudidos… Y al mirar la película completa, además de ver los desafíos, dolores, alegrías y logros, también podemos agradecer la enorme protección que incluso en los peores momentos tenemos… Este proceso de cambio, de lavado del ego, tiene un auspicio sagrado impresionante, nuestros guías están ahí, firmes y hasta renovados con nosotros, poniendo señales -soplidos al oído-, una que otra mano de ayuda, numerosas sincronías, encuentros, lecturas, conversaciones, aparentes fallos en distintas situaciones… Y más.

Aquí vamos: frágiles, fuertes, protegidos, renaciendo día a día desde el corazón, aunque duela y asuste… Cada día con más luz en el camino y en nuestra propia vida… Aguante abril y a -intentar- bailar con el centrifugado, que tiene su propio ritmo y sentido aunque no lo veamos desde el principio… Seguimos y, desde acá o desde donde estemos, muchos dedicamos todas las bondades (comodidades) que tenemos en nuestro cotidiano -las ofrecemos energéticamente- a todos los seres del norte de Chile que tanto nos están enseñando en medio de la precariedad y la incertidumbre. Gracias…. Les dejo esta letra chilena de la poderosa Anita Tijoux, con sonidos nortinos, que me regaló Carlos, quien la canta con fuerza a su Iquique, que ya está brillando con tremendo despertar purificador…

http://www.youtube.com/watch?v=MHvZZwNNxdw

 

 

Mágico equinoccio de otoño 2014

AriesCLos días ya son más cortos, se asoma la luz distinta del otoño, pero igual el calor de la última semana en Santiago se elevó por sobre los 30º, como si la llegada del Sol al fuego inquieto de Aries fuera literal… No sé, pero desde enero siento que algo fuerte viene para Chile o por estos lados sureños; capaz que es pura idea, pero siento que viene una oportunidad grande de crecer, de conectar con lo real y vivir más desde la consciencia, como si nos fueran a dar un remezón energético para atinar con lo verdadero; puede ser telúrico, volcánico, oceánico, económico, humano… Lo decía en una nota a comienzos de año: estamos en pleno Apocalypso… Que es personal y colectivo a la vez… Como dice Kevin Johansen en esa canción, «no trates de ser tan cool (genial, ondero) porque no lo vas a ser»… Síp, este tiempo es para la autenticidad del alma, es para bajar barreras, caretas, mecanismos, miedos, rabias, juicios, defensas, quejas, hábitos pegados; lograr detenernos y que nuestra esencia pura aflore cada día más

En esto de aterrizar y darle espacio al alma para que llegue del todo, se ajuste a lo nuevo y disfrute el proceso, me ha venido fuerte esta sensación de que algo viene, especialmente al mirar desde el balcón y los parques el cielo de marzo…También al «respirar» la ciudad y sentir la energía a ratos muy silenciosa y a ratos electrizante… Nuestro ego está enredado y se revuelca en dramas, lamentaciones, impaciencias, obsesiones, agresividad, apuros, expectativas, críticas, envidias; como si supiera -obvio que sabe- que el cambio de consciencia es cada vez más poderoso, que ya no puede caer en los berrinches de siempre y que está perdiendo, lenta pero efectivamente, supremacía, y por lo mismo patalea intentando engancharnos con nimiedades y empantanándonos para que no giremos hacia la luz… Pero es tremenda oportunidad también: ahora es un gran momento para mirarlo (al ego), para ver esa energía opaca nuestra, abrazarla y calmarla,  para poder hacer la alquimia transformadora que cada uno necesita en torno a sus propósitos de vida…

Por lo mismo, para muchos este tiempo está siendo re desafiante, duro… pero igualmente liberador y estimulante. Sucede que, a mi parecer, comenzó el centrifugado 2014 (si no entiende, busque notas anteriores, acá hay una), y puede ser divertido, vertiginoso, asfixiante, excitante, doloroso, aterrador… Liberador. Se me repite esta palabra que todo el rato me suena con los galopes del caballo 2014. Es uno de los ejes del año: liberarnos de las trampas y pantanos de nuestro ego que no quiere perder el control y puede aferrarse a antiguas creencias y roles que ya no nos corresponde representar… En vez de dejarle espacio al alma para que nos muestre con sabiduría el camino…

…El día antes del equinoccio me voy a uno de los cafés del barrio a escribir sobre esto y nos saludamos con los chicos que atienden y que me dicen que «andaba perdida», que hace rato que no me ven. Uno de ellos, que está feliz porque la Presidenta Bachelet acaba de asumir, sólo me guiña un ojo pues más de una vez hemos hablado de política y también echado bromas sobre el escenario actual… «Estás feliz» -le digo-. Ahora sí que síp, señorita. Qué quiere que le diga! -me responde con complicidad y nos reímos-. La energía femenina vuelve a instalarse en Chile y tiene la oportunidad de mostrarnos otros ritmos y formas, veremos qué pasa, e igualmente es -y será- un reflejo de nosotros, nada sucede afuera casualmente… Y además, como dice Patricia May en una nota de estos días: «(…) hay un trabajo personal que hacer, no podemos pedirle al mundo que sea lo que nosotros no somos».  Todo el ratop.

Una vez que me instalo y saboreo unas tostadas con palta, se sienta en la mesa del lado un tipo mayor que está un tanto loco -o capaz que no y sólo está en la suya- y que a veces lo echan de los cafés porque no siempre tiene plata, pero no es agresivo. Nos saludamos, yo figuro con audífonos porque estoy escuchando una entrevista, y él llama al mozo y entiendo que pide menú de almuerzo. Insiste en que quiere pollo con puré, pero hoy hay sólo carne y pescado, le dice el mozo con mucha paciencia. Y también quiere vino. —Mish, andamos con plata -le comento en broma al mozo, que se acerca a decirme que la otra vez almorzó y hasta le dejó propina-. Qué te parece! Le voy a decir si me invita -bromeo-. Entonces, cuando el mozo se va, mi vecino de mesa me mira y me dice algo que no entiendo. Sólo sé que me habla porque me insiste: chica, chica -me llama. —Perdona, es que estaba escuchando algo, dime -y lo miro temiendo que quiera hablar demasiado y me dé la lata, aunque obvio que le cortaré la inspiración si lo hace porque quiero dedicarme a lo mío (esta nota y decenas de correos pendientes)-. Entonces, él me sorprende y me lanza una sola tremenda frase: «Es mágica la vida» -y me mira subiendo la cabeza y las cejas como agregando la expresión implícita: ¿cierto?, mientras yo me quedo perpleja, agradecida y riéndome de mi ego que ya estaba subiendo sus barreras a punto de restarse de este regalo por puros prejuicios-. Le digo: sí, mucho, más de lo que creemos -y él asiente con la cabeza-.  Luego agarra el diario y cuando llega su orden la devora con deleite. Al poco rato se va y nos despedimos… Me quedo observando su caminar pausado y algo encorvado. Digo: gracias por la señal, gracias por la confirmación…

Por si lo estaba dudando, la energía divina de la Vida y los guías que nos acompañan nos mandan señales a cada rato, sólo que si vamos apurados o distraídos en la mente-emoción no las vemos… Claro, porque justo yo estaba un tanto agobiada con temas personales y laborales, disfrutando igual, pero sintiéndome entre a la deriva e inmóvil,  y viene este maestro y se lanza tamaña afirmación. Maravilloso. Tremendo empujón pa’ salir de mis lamentaciones y seguir con más fe. Me río sola camino a casa, respirando el aire cálido. Recorro instantes del fin de 2013 y los galopes 2014… Iba a escribir más, pero no. Nada más que decir por ahora: es mágica la Vida. Gracias.